"Tras la sentencia se convocará la asamblea de cargos electos de Cataluña para decidir la dirección y la estrategia de la nueva fase". Carles Puigdemont y su Consejo de la República, el gobierno en la sombra de Cataluña, constituirán una "asamblea de cargos electos" formada por ediles, concejales, alcaldes y diputados del Parlament para decidir los primeros pasos de la segunda fase.
Se trata de un 'nuevo Parlamento autonómico' con todos los actores del independentismo, pero "abierto a todos", especialmente a quienes piden la autodeterminación. "Si hay una sentencia condenatoria por rebelión o sedición, se abre un nuevo escenario", ha afirmado.
"Cualquier decisión será sometida a referéndum"
El Consell de la República asume así responsabilidades propias de un gobierno al asegurar que "cualquier decisión será sometida a referéndum". "No se trata de decidir por el presidente de la Generalitat", ha afirmado Puigdemont. "Está convidado todo el mundo a esta asamblea de legitimidades, y se tomarán las decisiones de todas las instituciones", ha considerado.
"La autodeterminación no implica la independencia. Hay que debatir y votar sobre ello", ha señalado Puigdemont. "En el mundo local, la fuerza de los partidos separatistas es muy representativa de las personas que viven en estos municipios", ha considerado para tratar de legitimar este grupo de trabajo, al que espera que se sumen los Comunes de Jaume Asens.