La 'candidatura' de Alejandro Soler a la secretaría general del PSPV sigue avanzando y, salvo sorpresa mayúscula o imposición de Ferraz, la presentará después de este fin de semana de Conferencia Política del PSOE en La Coruña.
Soler está aguantando el tirón que supone no ser el favorito de Ferraz que mantiene su apuesta por la ministra de Ciencia y Universidades: la gandiense Diana Morant.
Vía de consenso
Ese pulso interno de Soler –que nadie esconde en la federación socialista valenciana– no tiene ganador aún y no ha habido avances significativos respecto a la semana pasada cuando la dirección federal 'recomendó' aplazar la ejecutiva nacional del PSPV prevista para el lunes pasado (por segunda vez) para intentar encontrar una vía de consenso.
El problema es que Soler ya se ha lanzado en Alicante y dar marcha atrás en sus pretensiones tendría un mal encaje entre sus propios seguidores.
El secretario general provincial alicantino, eso sí, no es un 'kamikaze' y en sus conversaciones con el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, ha dejado una puerta abierta al consenso. Él sería el secretario general del PSPV y Diana Morant la candidata en 2027: la famosa bicefalia inexplorada en el socialismo valenciano.
Sánchez no quiere riesgos
Las fuentes consultadas por Vozpópuli en el PSPV y en la dirección federal coinciden en que Soler puede haber cobrado ventaja en la carrera por la secretaría general y que Pedro Sánchez no quiere correr riesgos. Ferraz ve hoy por hoy "difícil" una candidatura de consenso.
El primer peligro sería enfrentar el proceso de primarias con la posibilidad de que Morant no ganara, lo que la dejaría prácticamente eliminada de la carrera hacia las autonómicas de 2027. El segundo, tampoco menor, es que el propio Sánchez llegada esta circunstancia evidenciaría que no tiene el control del partido.
El secretario general del PSOE ha marcado en rojo en el calendario la Conferencia Política de este fin de semana en La Coruña y, al margen de la renovación ideológica y la reestructuración de la dirección federal, tiene previsto abordar la cuestión valenciana.
Un encuentro clave
En ese encuentro en el que estarán presentes los tres posibles candidatos, Soler, Morant y el secretario general provincial de Valencia, Carlos Fernández Bielsa, puede haber algún avance pero es difícil cuando en el congreso extraordinario previsto por el PSPV para este trimestre no hay más que un puesto de caza mayor: el de la secretaría general.
Si Morant finalmente no presentara su candidatura y pactara con Soler ser ella la cabeza de cartel de en 2027 surgirían otros riesgos que Ferraz también valora.
Reacción del 'ximismo'
Uno de ellos sería que parte de los apoyos de Ximo Puig podría no ver con buenos ojos a Soler como secretario general. Para eso, expresan algunos de los integrantes de esta corriente a Vozpópuli, "lanzaríamos a alguien de nuestra confianza", en clara alusión a la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé.
También se activaría la opción de que Carlos Fernández Bielsa diera el paso de presentarse si lo dejan 'fuera' de la solución final para el congreso extraordinario.
Alcaldes valencianos que respaldan a Bielsa aluden, consultados por este medio, a que hasta la fecha "no hay constancia de un acuerdo entre bambalinas entre Soler y Morant". Expresan su confianza en la estrategia de Bielsa de no mostrar sus cartas y esperar a los movimientos de los otros aspirantes.
La estrategia de Bielsa
Ahora bien, en ningún caso consideran que el secretario general provincial valenciano dejaría pasar su oportunidad de luchar por el liderazgo del partido y que llegado el momento "la militancia decidirá", parafraseando a Santos Cerdán que así lo expresó en el Comité Nacional de despedida de Ximo Puig.
Lo que sí parece difícil, a día de hoy, es que Pedro Sánchez imponga a Morant por las bravas, sabedor de que podría provocar un efecto rebote entre parte de la militancia difícil de calibrar en la celebración de unas primarias.
El precedente de Bonig en el PPCV
El caso más reciente en la política valenciana de apuesta de una dirección nacional por un candidato se encuentra en el actual presidente de la Generalitat, Carlos Mazón. Fue aupado por Pablo Casado y Teodoro García Egea frente a Isabel Bonig que acabó cediendo tras meses de pulso interno y facilitó una candidatura única del actual jefe del Consell.
Alejandro Soler se puede ver en la misma tesitura que Bonig pero hasta la fecha Ferraz sólo ha realizado gestos como los de aplazar la ejecutiva nacional del PSPV una semana más. No ha empleado métodos coercitivos que algunos cargos de la federación socialista valenciana sí vislumbran que se pueden llegar a emplear el próximo fin de semana. Todo dependerá de lo que decida Sánchez.