España

"El Gobierno no puede cambiar su postura respecto a Cataluña porque no se deriva de un capricho"

Soraya Sáenz de Santamaría ha afirmado que el Ejecutivo no cambiará su postura respecto a la consulta soberanista de Cataluña pese a la manifestación de la Diada. "España está saliendo de la crisis y saldremos mejor todos juntos como juntos hemos hecho muchas cosas a lo largo de nuestra historia".

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha dicho este viernes que el Ejecutivo no cambiará su postura respecto a la consulta soberanista de Cataluña pese a la manifestación de la Diada celebrada ayer porque, tanto él como la Generalitat de Cataluña, están sujetos al cumplimiento de la Constitución.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, recogida por Europa Press, Santamaría ha mostrado su respeto al derecho de manifestación de todas las personas que este jueves participaron en la 'V' convocada en Barcelona, pero ha recordado que la Constitución que permite esa manifestación es la misma que establece "los procedimientos y sistemas" por los que los gobernantes pueden cambiar el sistema constitucional".

"El Gobierno no puede cambiar su posición porque no es derivada de una decisión ni un capricho", ha remarcado insistido en que todos los gobernantes tienen "la obligación" de cumplir la ley "y hacerla cumplir", tanto el Gobierno como la Generalitat de Cataluña.

"Seguiremos trabajando para solucionar las necesidades de los catalanes y manteniendo el diálogo con las instituciones catalanas", ha asegurado defendiendo que "trabajamos mejor todos juntos. Creo que España está saliendo de la crisis y saldremos mejor todos juntos como todos juntos hemos hecho muchas cosas a lo largo de nuestra historia. Quiero que se tenga eso muy presente". 

"Este Gobierno, lo he dicho muchas veces, es también un gobierno para los catalanes", ha zanjado al respecto. 

Preguntada por los mensajes que Jorge Moragas envió a la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola con los que impulsó la causa contra los Pujol en los tribunales, tal y como adelanta Vozpópuli, la vicepresidenta del Ejecutivo ha zanjado el asunto afirmando que "este Gobierno no comenta comunicaciones privadas que se han hecho públicas. Respetamos los procesos judiciales".

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