Dos agentes de la Policía Municipal de Madrid resultaron contusionados la pasada semana al chocar su vehículo con otro coche mientras se dirigían con la sirena a un servicio urgente. El conductor de ese segundo vehículo explicó que no había escuchado la sirena del coche patrulla. Los policías que conducen estos coches dicen que los nuevos vehículos han sido dotados de unas sirenas que apenas se escuchan si un conductor lleva puesta la radio. Fuentes municipales indicaron que cumplen la nueva normativa de contaminación acústica y que ha aumentado un 40% la potencia lumínica.
El sindicato CSIT-Unión Profesional ha hecho llegar al concejal de Seguridad, Enrique Núñez, un escrito en el que un agente relata las deficiencias de los nuevos vehículos. El propio sindicato señala que "las señales acústicas de baja potencia han provocado ya un accidente". "Es necesario poder avisar a los ciudadanos que circulan por Madrid, por lo que es vergonzoso la falta de profesionalidad de algunos, y mucho más aún, las explicaciones que se otorgan para defender el enmudecimiento de las sirenas".
Este sindicato señala que "no consideramos que anteponer la integridad física de profesionales y ciudadanos a la prevención de la contaminación acústica sea un acierto". Los agentes se quejan también de que los vehículos son pequeños y apenas permiten a los policías poder moverse dentro del coche de manera holgada, especialmente los que tienen una estatua superior a 1,75 metros.
Denuncian que la reparación de los ordenadores se hace dejando al margen al departamento de informática del cuerpo, lo que dificulta su trabajo pues la empresa no está operativas 24 horas al día lo que reduce la operatividad de los coches. Consideran que la aplicación que permite la grabación de imágenes desde los vehículos dotados con cámara "no es efectiva puesto que la mayoría de los casos no da tiempo a avisar para dar comienzo a la grabación cuando sucede un hecho relevante de forma sorpresiva".
Mala iluminación
También creen que los sistemas de iluminación para realizar controles son inadecuados, de grandes dimensiones y obsoletos, no cumpliendo con la función y resultados para los cuales han sido encomendados. Los policías dicen que los elementos que sustentan los ordenadores portátiles y cámaras de los vehículos se convierten en cuchillas dentro del habitáculo en caso de accidente y citan que no han pasado una inspección de la ITV que autorice su uso.
El sindicato señala que ninguna de las modificaciones que se ha hecho a los nuevos coches viene a contribuir de manera positiva a mejorar los posibles daños de los policías que están obligados a utilizar los vehículos.
Un portavoz de CSIT dijo que los patrullas utilizados no están preparados expresemante para su labor policial , por lo que la conducción se hace menos segura, operativa y fiable no soportando en numerosas ocasiones las situaciones a las que han de enfrentarse. "La Administración ha preferido optar por seguir instrucciones de personas ajenas en vez de escuchar a los profesionales que pasan miles de horas al volante"