El Jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Teodoro López Calderón, advierte de las nuevas necesidades a las que se enfrentan las Fuerzas Armadas después de que la OTAN haya definido su hoja de ruta frente a las principales amenazas. Entre otros, asevera que "necesitamos más personal del que tenemos para hacer frente a nuestras misiones", con una característica concreta: "Las Fuerzas Armadas tiene requieren un grado de adiestramiento adecuado para el combate de alta intensidad".
El Jemad ha apoyado en una entrevista en 'Cadena Cope' la decisión de incrementar el gasto en materia de Defensa, tal y como planea Defensa y en consonancia con otros países de la OTAN. "Necesitamos estabilidad presupuestaria que permita una mayor planificación". Porque planificación en materia militar permite una respuesta más eficaz ante las amenazas que se ciernen sobre la Alianza y la Unión Europea. Al menos, esa es la conclusión a la que se ha llegado en la Cumbre que se celebra estos días en Madrid.
"[La OTAN] nos va a pedir mayor capacidad de reacción, mayores fuerzas alistadas para desplegarse en un periodo de tiempo más corto y con mayor capacidad de combate", declara el almirante general López Calderón. "Dice que tenemos que mejorar las capacidades militares que tenemos en Europa para hacer frente a las amenazas definidas en el concepto estratégico".
¿Y cómo se traduce eso en España? "Hemos ido mejorando la operatividad, pero hay que seguir incrementándola. Hay que adaptarla a recurso económico disponible y los años de crisis han sido muy duros para las Fuerzas Armadas".
Las amenazas de la OTAN
Como principal amenaza se erige Rusia, tras la invasión de Ucrania. También el terrorismo, que ya ha hecho del Sahel africano y el norte del continente su principal zona de actuación, trasladando el desafío a las propias fronteras de España.
En este sentido, el Jemad asevera que Rusia y China han extendido su área de influencia en el Sahel; Moscú lo hace con una mayor presencia militar -directa o indirecta, a través de los contratistas de Wagner-, mientras que Pekín lo sostiene a través de acuerdos económicos y la explotación de recursos esenciales.
"La OTAN se ha planteado ir a los orígenes del problema en cooperación con la UE. Hay hambruna y terrorismo, que no permite un desarrollo económico adecuado. El cambio climático es un problema añadido a la realidad sobre el terreno. Podemos incrementar la seguridad cooperativa: ir allí y, de acuerdo con esos países, darles potencial, capacidades y conocimientos para establecer el orden en sus propias fronteras".
En este sentido, el Jemad reflexiona que corremos el "peligro" de volver a establecer un "mundo de bloques", similar al que se vivió en la Guerra Fría pero con algunas diferencias sustanciales: "En esa época había prioridad de la expansión ideológica, ahora es de carácter económica: tener influencia y rendimientos económicos con acceso a materias primas".
