En el PP aún no se lo creen. La reforma laboral de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz podría haber sido derogada ayer en el Congreso si no llega a ser por el voto afirmativo de Alberto Casero, diputado del PP por Cáceres y mano derecha de Teodoro García Egea. Los populares insisten en que el voto afirmativo se debe a un error informático y acusan a Mertixell Batet, presidenta del Congreso, de "cacicada" por impedir su rectificación. Irán hasta el final con su protesta, pero en el partido empiezan a asumir una derrota dolorosísima en una votación clave de la legislatura.
Todo se torció para el PP en 45 minutos. En ese lapso de tiempo, el que fue de las cinco y cuarto a las seis de la tarde, los diputados que no estaban en el hemiciclo podían votar telemáticamente. Y fue entonces cuando Alberto Casero se encontró en su pantalla un certificado con un 'sí' a la reforma laboral cuando su intención, y según el PP su sentido de voto, fue el contrario.
Según explican a Vozpópuli cargos del PP muy próximos a Casero, el diputado por Cáceres se encontraba indispuesto por una dolencia estomacal y, pese a estar en Madrid, decidió votar de forma telemática. Nadie le acompañaba en ese momento, por lo que no tiene testigo alguno que acredite que su voto fue un 'no' aunque en el certificado emitido por el Congreso saliera un 'sí'.
Nada más encontrarse con ese resultado en la pantalla del ordenador, quiso contactar con la dirección de la Cámara, pero sin éxito. El siguiente paso fue advertir a la dirección del Grupo Parlamentario de lo ocurrido y trasladarse de urgencia al Congreso para tratar de solucionar ese "error informático", tal y como lo han calificado los populares.
El PP dará la batalla...
La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, explicó ante los medios que la dirección del Grupo Parlamentario, y también la vicepresidenta de la Cámara, Ana Pastor, hicieron saber a Meritxell Batet lo ocurrido. En ese sentido, afirmó que la presidenta del Congreso, y el resto de integrantes de la Cámara, "eran conscientes de que había una anomalía" y que, aún así, "decidieron continuar con la votación".
Desde el partido, de hecho, difundieron a última hora del jueves una fotografía en la que puede apreciarse que, antes de la votación presencial, el Grupo Popular informó a la presidenta del Congreso del "fallo informático" en el voto de Casero. Una advertencia que Meritxell Batet ignoró.
Gamarra calificó esta decisión como una "cacicada" añadiendo además que, "cuando el Grupo Parlamentario quiso poner en conocimiento del Pleno lo ocurrido, Batet dio por concluido el mismo y la Mesa no ha sido reunida".
El PP, en todo caso, sí forzó una reunión posterior con la propia Meritxell Batet, en la que participaron los representantes del partido en la Mesa, Ana Pastor y Adolfo Suárez Illana, y el secretario general del PP, Teodoro García Egea.
Los populares insistieron, en esa reunión, en la necesidad de que se rectifique el voto de Casero, teniendo en cuenta, además, que la convalidación de la reforma laboral ha sido posible "por un voto que se ha contabilizado de forma diferente a cómo ha sido emitido por el diputado".
La convalidación de la reforma laboral ha sido posible por un voto que se ha contabilizado de forma diferente a cómo ha sido emitido por el diputado
Desde el PP destacan, además, que el Reglamento del Congreso, recogido en el Boletín Oficial de las Cortes Generales de mayo del año 2012, establece que, una vez emitido el voto telemático, "la Presidencia u órgano en quien delegue, comprobará telefónicamente, con el diputado autorizado, antes del inicio de la votación presencial en el Pleno, la emisión efectiva del voto y el sentido de éste".
Esa comprobación telefónica, insisten, no se ha producido. Y a eso se van a agarrar los populares para exigir que se rectifique el voto de Casero.
... pero lamenta la suerte de Sánchez
En todo caso, desde el Congreso ya advierten que no consta un error informático y que se ha procedido con el diputado del PP por Cáceres como con el resto de diputados: "Nunca se hacen esas llamadas. Ni siquiera se realizaron durante el estado de alarma".
Las fuentes consultadas recuerdan además que, sobre la reforma laboral, los diputados tenían que emitir dos votos: uno de apoyo, rechazo o abstención al real decreto; y otro para que se tramitara o no como proyecto de ley.
El PP dio instrucciones claras a los diputados de su Grupo: "'No' al decreto, y 'sí' a que se tramite como proyecto de ley". Algunos, en el Congreso, creen que "ahí estuvo el fallo" de Casero: "Probablemente, votó que sí al decreto de la reforma laboral pensando que estaba apoyando su tramitación como proyecto de ley".
Probablemente, votó que sí al decreto de la reforma laboral pensando que estaba apoyando su tramitación como proyecto de ley
Esa tesis se confirmó horas después, cuando la web registró el sentido de voto de todos los diputados a las iniciativas parlamentarias presentadas en el día de ayer. Casero, además, votó en contra de una moción del PP para vigilar la agenda legislativa del Gobierno. Tres errores que, según el PP, se debieron a un "error informático"
Esa reivindicación, de hecho, la expresó el propio Casero de forma presencial en el Congreso, ya que decidió trasladarse a la Cámara Baja para tratar de solucionar el error en la votación. Tal y como afirmó Cuca Gamarra, "se dieron instrucciones a los funcionarios del Congreso para no permitirle entrar en el hemiciclo".
Desde otros grupos parlamentarios -a excepción de Vox, que respalda al PP y ha anunciado que llevará la votación ante el Tribunal Constitucional- advierten, sin embargo que "el voto telemático no puede cambiarse" y que "ya se han producido situaciones similares sin que después se haya cambiado el sentido del voto".
En el PP, sin embargo, advierten que "vamos a llegar hasta las últimas consecuencias" y, públicamente, se muestran confiados en hacer decaer la votación. Cargos del partido, consultados por Vozpópuli, afirman que "es totalmente recurrible ante el Tribunal Constitucional". Una medida que ya anticipó Casado a última hora del jueves.
Estas mismas fuentes, sin embargo, no pueden evitar su frustración con lo vivido ayer en el Congreso: "Parece increíble. Pedro Sánchez tiene una flor en el culo, y esta votación lo ha vuelto a demostrar".
Las 'siete vidas' del presidente
En el PP recuerdan, en este sentido, otras votaciones que Sánchez sacó adelante in extremis o contra todo pronóstico. En esta lista incluyen prórrogas del estado de alarma -como la que salvó Bildu tras un pacto cerrado en el mismo día de la votación-, el decreto de los interinos... o la aprobación del decreto de los fondos europeos.
Ese último antecedente, de hecho, estaba más que presente en la retina de los populares que, en la defensa a capa y espada de su 'no' a la reforma laboral, también pusieron como argumento la posibilidad de forzar a Vox a cerrar un nuevo pacto con el PSOE.
En la votación de ayer, sin embargo, esa "pinza" no se produjo... y fue un voto del PP el que salvó a Sánchez. El presidente del Gobierno, como cantaba el actual director de la Oficina del Español Toni Cantó, ha vuelto a demostrar que tiene siete vidas.
