Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado 12 de marzo a un hombre, de origen colombiano y 25 años, como presunto autor de un delito de malos tratos y quebrantamiento de condena, en Manacor.
En una nota de prensa, la Policía ha informado de que los agentes, mientras realizaban labores de vigilancia de la víctima, debido a la situación de riesgo extremo que sufría la mujer respecto de su expareja, observaron en las inmediaciones del domicilio donde se encontraba la misma, como se dirigía hacia este el detenido, quien tenía una orden de alejamiento, a parte de ser buscado por un delito de malos tratos hacia la víctima.
En un primer momento, los policías vieron a un hombre vistiendo capucha y gorra, con actitud huidiza y vigilante, dirigiéndose hacia el domicilio, por lo que se acercaron a él y le dieron el alto, acelerando el mismo el paso e intentando alejarse, emprendiendo la huida a la carrera, siendo perseguido en todo momento por los actuantes, sin perderlo de vista, hasta interceptarlo.
En ese momento, los agentes comprobaron la identidad del hombre, resultando ser la pareja de la víctima, al que le constaba una orden de alejamiento de la mujer, infringiendo la misma, así como una orden de búsqueda y detención por un delito de malos tratos.
La mujer ya había sufrido lesiones previas en la misma mañana por parte del hombre.
El día antes de la detención, los agentes fueron comisionados por la Sala del 091, donde se recibió una llamada comunicando un quebrantamiento de condena, motivo por el que acudieron los policías al lugar, no encontrando sin embargo al hombre en las inmediaciones.
El detenido ya había golpeado a la mujer ese día
El detenido habría acudido al domicilio donde se encontraba la víctima y habría aporreado la puerta, después de que la mujer ya hubiera sufrido lesiones previas en la misma mañana por parte del hombre. Por ello, se avisó a los agentes de la importancia de la búsqueda del hombre y, una vez valorada la entidad de los hechos y la situación de riesgo existente, se determinaron como medidas específicas para proteger a la víctima vigilar la vivienda donde se encontraba.
Al presunto agresor le constan antecedentes previos por diferentes episodios de malos tratos y quebrantamiento de condena.