La Guardia Civil ha detenido a 17 personas, entre las que figuran cinco agentes del Instituto Armado, por delitos relacionados con el cohecho, tráfico de influencias, revelación de secretos, omisión del deber de perseguir delitos y falsedad documental. No se descartan más detenciones o que se citen como investigadas a más personas en el marco de las pesquisas.
Según fuentes oficiales consultadas por Vozpópuli, la Guardia Civil ha instruido diligencias y practicado dos entradas y registros domiciliarios en el marco de la investigación, bautizada como Operación Cinabrio. De los 17 detenidos, ocho ya han sido puestos en libertad y el resto pasan a disposición judicial. Entre los efectos intervenidos figuran un teléfono móvil, un ordenador portátil y documentación.
Cuatro de los cinco agentes de la Guardia Civil arrestados estaban destinados en puestos de Seguridad Ciudadana de Almadén y su comarca; el quinto, en el Destacamento de Tráfico de Puertollano. La investigación de los guardias civiles ha corrido a cargo del Servicio de Asuntos Internos del Instituto Armado.
De acuerdo a la información facilitada por la Guardia Civil a través de fuentes oficiales, la colaboración ciudadana ha sido "fundamental" para iniciar las pesquisas. Medios regionales apuntan a que los delitos habrían tenido lugar en el marco de la gestión de licencias de caza, si bien aún no hay ninguna confirmación oficial al respecto.
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha detalla que este miércoles la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Único de Almadén (Ciudad Real) ha tomado declaración a un total de 17 personas, 8 en calidad de detenidas y 9 en calidad de investigadas. El Juzgado tenía abiertas desde septiembre de 2020 Diligencias Previas en las que se investigan los hechos.