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El ministro británico de Defensa, Liam Fox, ha presentado su dimisión tras verse envuelto en un escándalo por incluir a un amigo en reuniones y viajes oficiales, según informa la cadena británica BBC. Fox ha estado bajo presión después de una semana de alegaciones acerca de su relación laboral con su amigo y consejero Adam Werrity.
En una carta al primer ministro, David Cameron, Fox afirma que ha permitido erróneamente que sus responsabilidades profesionales y personales se confundieran. El responsable de Defensa se ha enfrentado a alegaciones sobre sus vinculaciones con Werrity después de que descubriera que éste ha acompañado a Fox en dieciocho viajes al extranjero, a pesar de no tener un cargo oficial.
Liam Fox estaba siendo investigado por el secretario del Gobierno en medio de acusaciones de haber roto el código ministerial. En su carta de dimisión, admite que las consecuencias de estos hechos se han aclarado en los últimos días y pide disculpas por lo ocurrido.
“También he dicho repetidamente que el interés nacional siempre debe ir antes del interés personal”, añade en la misiva. “Ahora tengo que mantener mi propio estándar. Por eso he decidido, con gran tristeza, dimitir de mi puesto como ministro de Defensa”, concluye.