La educación se ha convertido en uno de los grandes motivos de disputa entre las distintas formaciones políticas de cara al 21-D. Poner fin al adoctrinamiento denunciado en algunas escuelas catalanas es uno de los retos que Ciudadanos y PP plantean -y prometen- en sus programas electorales, una práctica que continúan sin admitir los líderes de ERC y PDeCAT. Además de reprochar a los nacionalistas que se preocupan más de enseñar a los alumnos qué pensar y no a pensar por si mismos, los partidos constitucionalistas también incluyen en sus hojas de ruta la apuesta por la enseñanza en catalán, español e inglés.
A tres días de los comicios, el sindicato de enseñanza AMES,presenta un estudio con el que pretende "desenmascarar los contenidos adoctrinadores por acción o por omisión, clamorosos o solapados"
La última "trifulca" a propósito del adoctrinamiento tuvo lugar durante el tramo final del debate a siete emitido este domingo por La Sexta, cuando el cabeza de lista del PPC García Albiol aseguró que "en una parte de las escuelas" catalanas "se adoctrina" y calificó de "vergüenza" que en algún caso se hayan coreado eslóganes en favor de la libertad de los "presos políticos" soberanistas. Los consejeros cesados Josep Rull (Junts per Catalunya) y Carles Mundó (ERC) lo negaron rotundamente y calificaron las palabras del popular de "mentira".
En plena campaña electoral, a tres días de los comicios, el sindicato de enseñanza AMES, en colaboración con la Asociación de Profesores por el Bilingüismo (APB), ha presentado un último informe en la librería Laie titulado 'Adoctrinamiento ideológico en los libros de ESO de la materia Ciencias Sociales: Geografía e Historia utilizados en Cataluña durante el curso 2017/2018' con el que pretenden "desenmascarar los contenidos adoctrinadores por acción o por omisión, clamorosos o solapados". "Ahora sólo hace falta que el Gobierno de la Nación tome las medidas pertinentes para enderezar una situación que dura ya demasiados años", solicitan desde la APB.
Geografía e Historia
Si el pasado mes de abril lanzaban un documento similar pero con libros dirigidos a la etapa de Primaria, es decir, la que cursan los niños de 6 a 11 años, este estudio se centra en manuales de Geografía e Historia de 2º, 3º y 4º de ESO de las principales editoriales que operan en Cataluña. "Para analizar las diferencias con libros de otras Comunidades Autónomas, también se han revisado los de una editorial que publica tanto en Cataluña como en la Comunidad de Madrid", explican los autores. Y advierten que "también se han encontrado planteamientos ideológicos partidistas" que "no son compatibles con nuestra Constitución".
Según han constatado los docentes, la Historia de España se presentaría como un constante conflicto entre España y Cataluña. Los tres enfrentamientos más repetidos de acuerdo al informe son la Guerra dels Segadors, la Guerra de Sucesión y la proclamación de la República de Cataluña. "En muchos de los libros revisados los gobernantes de España siempre aparecen coartando las libertades, las costumbres, las tradiciones y la lengua propia de Cataluña, mientras que los gobernantes catalanes siempre aparecen defendiéndolas y sin cometer error alguno. Generalmente no se hace ninguna referencia a acciones positivas por parte del Gobierno de España, ni a proyectos comunes, ni a éxitos conjuntos, etc.", señalan a modo de conclusión.
Destacan términos como "Corona catalanoaragonesa", en lugar de Reino de Aragón, o "Estado español" o "Monarquía hispánica" por encima de "España"
Otros términos que destacan son "Corona catalanoaragonesa", en lugar de Reino de Aragón, o el "Estado español" o "Monarquía hispánica", que en ocho de los libros revisados, se prioriza sobre el término "España". "Se hace creer que la Cataluña inicial comprendía Aragón o era del mismo rango que Aragón; se le otorga a Cataluña la categoría de Reino; se presenta la Guerra de Sucesión como una guerra contra Cataluña, en vez de hacerlo como una guerra entre dos aspirantes; se presenta la declaración del Estatut por Macià o/y del Estat Català por Companys, como un hecho legal y positivo; se presenta el nacionalismo catalán y su uniformidad (catalanidad) como bueno y el español (españolidad) como malo en seis libros y se silencian los errores de los dirigentes de Cataluña, o se los considera aciertos, y se hace lo contrario con los dirigentes de España", denuncian desde AMES.
"Después de leer esto [libros de texto] es muy difícil que un alumno catalán adquiera identidad española, que se sienta español. Es muy probable que se sienta solo catalán porque esta acumulación de injusticias a lo largo de los siglos no invita a continuar con proyectos de futuro juntos", ha explicado Antonio Jimeno, presidente del sindicato de profesores AMES. Además ha insistido en que el Ministerio de Educación debería disponer de los mecanismos necesarios para controlar que en los centros educativos sólo se enseñe lo que está establecido por las leyes generales de educación y que lógicamente coincide con los valores establecidos en la Constitución. Llevar a cabo unas evaluaciones al final de la etapa de la ESO en aras de una educación "objetiva, plural y compatible con la Constitución" sería una posible solución para el sindicato.