Aplicación del artículo 155 en Cataluña, sí, pero con el mínimo impacto posible. El ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo -habilitado como titular del Departamento de Enseñanza de Cataluña para ejercer las funciones y disposiciones que antes de la declaración unilateral de independencia correspondían a la exconsejera Clara Posantí, huida a Bruselas junto a Carles Puigdemont-, ha decidido nombrar al secretario general de Enseñanza de la Generalitat, Lluís Baulenas, como presidente del consejo de dirección del Consorcio de Educación de Barcelona.
El brazo derecho de Posantí, de nuevo, a cargo de la gestión de los centros educativos públicos de Infantil, Primaria, ESO y postobligatoria de Barcelona, según recoge este viernes el BOE.
El consorcio está participado en un 60% por la Generalitat y en un 40% por el Ayuntamiento de Barcelona, por lo que, en la víspera del 1-O, dependía de su directiva que los centros escolares se convirtiesen en puntos de votación para llevar a cabo el referéndum. Dado el carácter ilegal de la consulta, y en plena búsqueda de locales para celebrar los comicios, Puigdemont decidió cesar a Baulenas y colocar a la propia Posantí, la misma consejera de Enseñanza de la Generalitat.
Responsabilidades
Nombrada en julio precisamente por su firme compromiso con el referéndum, a Ponsatí no parecía importarle asumir las responsabilidades legales que suponían los comicios y proteger así a Baulenas y a otros responsables de la política educativa catalana.
El Departamento desvinculó el "trueque" al referéndum; los centros escolares abrieron para votar, previa garantía de la entonces consejera y presidenta del Consorcio a los directores sobre que no tendrían ninguna responsabilidad penal el 1-O; se declaró la independencia; se aplicó el artículo 155 y Ponsatí se fugó a Bruselas junto al ex presidente de la Generalitat.
Máxima confianza
Desde Bélgica, la exconsellera envía mensajes de apoyo a los profesores y directores que se han visto obligados a declarar ante un juez al ser denunciados por supuesto adoctrinamiento político en las aulas. También reconoce que "el Govern no estaba suficientemente preparado" para la independencia.
En una entrevista en RAC1 aseguró que no tuvieron en cuenta la "fuerza del nacionalismo español", a quien acusa de utilizar "de forma antidemocrática y en ocasiones violenta" la reacción contra el soberanismo. "Yo tenía clarísimo que si me hubiera quedado en Barcelona habría ido a la cárcel", aseguró.
Con el nombramiento de Baulenas "en virtud de las medidas autorizadas" en aplicación del artículo 155 de la Constitución, el Gobierno entrega la gestión de numerosos centros escolares públicos a alguien a quien se le tachó de no ser "lo suficientemente independentista", pero uno de las personas de máxima confianza de la economista catalana.