En el Real Club de la Moraleja siguen sin dar crédito al espectáculo protagonizado por el socio J.G.S., alias 'el salmonete', como se le ha bautizado en redes sociales, al acudir con una 'escort' brasileña de 25 años y armar la marimorena. La bronca del socio díscolo y su acompañante femenina con el personal de este club de alto standing ha corrido por las redes como la pólvora y ha provocado una reacción inmediata por parte del club, que ha levantado un expediente sancionador al susodicho según confirman a Vozpópuli fuentes internas. 'El salmonete' no ha sido capaz de lidiar con esta fama inesperada y ha borrado todas sus redes sociales.

Un Comité de Disciplina del Real Club de la Moraleja se reunirá en los próximos días para determinar el futuro de este socio. Hasta la fecha, solo una persona ha sido expulsada con carácter irreversible del club, y todo apunta a que la sanción que se le impondrá a J.G.S. sea la expulsión temporal. "Hay que determinar si estamos ante una infracción grave o una muy grave. Creemos que los actos de este socio estarían en un punto medio entre las dos", explican desde el establecimiento.

Según el Reglamento Disciplinario de este exclusivo club, al que ha accedido este diario, entre las infracciones graves y muy grave figuran "los actos que signifiquen desconsideración o falta de respeto hacia los demás, socios, usuarios, empleados o personal del Club". Serán las propias circunstancias las que determinen si esas faltas de respeto tienen la consideración de grave o muy grave.

Una de las circunstancias agravantes es, por ejemplo, "el empleo de violencia". En los vídeos disponibles sobre lo ocurrido se puede ver cómo la 'escort' brasileña que acompaña al socio se encara con una señora que grababa todo, propinándole un puñetazo y varios bolsazos, provocando el terror de la socia: "¡Que me pega!". El responsable último de este acto de cara al club no sería otro que 'el salmonete'.

Si los miembros del Comité de Disciplina consideran el asunto como grave, J.G.S. se enfrentaría a una suspensión del derecho de acceso y uso de las instalaciones por un período de entre 16 días y 6 meses. En cambio, si sentencia la infracción como muy grave, este socio podría ser expulsado por un período de 6 meses a 3 años. Es más, las sanciones para casos muy graves también contemplan la "expulsión permanente como miembro del club y usuario de sus instalaciones". Fuentes de La Moraleja señalan que lo más probable es que se dictamine una expulsión temporal y no de carácter permanente. Eso sí, el tiempo que tenga vetada su entrada al club, famoso hasta ahora por su campo de golf, el socio deberá seguir pagando la cuota por pertenecer al mismo, que cuesta entre 5.000 y 6.000 euros al año.

Una escena digna de 'Aquí no hay quien viva'

Todo aconteció el domingo por la tarde, en plena ola de calor madrileña. J.G.S. acude a la piscina con una 'escort' brasileña de 25 años y turgente busto. Se rumorea que este socio pasa por problemas familiares, motivo por el cual acudió al club con tal compañía. Fuentes presentes aseguran que no estaba del todo sobrio aquella tarde: "el socio no estaba en su mejor momento". La señorita morena se puso a hacer toples, algo prohibido por la normativa vigente del club, y unas señoras acudieron a reprochárselo.

La mujer hizo caso omiso a las señoras y siguió paseándose con los pechos al aire mientras el socio díscolo las llamó, al parecer, "malfolladas". Algunas personas indican que el socio habría miccionado en unos setos cercanos al socorrista, pero este último punto no ha sido confirmado por fuentes de La Moraleja. Lo que sí aseguran es que se advirtió tres veces a la acompañante de 'el salmonete' que no podía ir con los pechos descubiertos en aquella piscina y las tres veces se enfrentó al personal, produciendo su posterior expulsión y pelea a las puertas del club. Todo digno de un guion de 'Aquí no hay quien viva'.

"Estas cosas no suelen ocurrir. A uno de los socorristas lo mordieron y todo. A un mando intermedio le dieron un bolsazo. No hemos tenido problemas de este tipo antes con este socio, ni con cualquier otro. No habíamos vivido nada así", aseguran desde el Real Club.

A uno de los socorristas lo mordieron y todo... No habíamos vivido nunca nada asíFuentes del Real Club de La Moraleja

El socio no ha pedido disculpas todavía a los miembros del club pero sí que se ha dado de baja en todas sus redes sociales. "No es consciente del lío en el que se ha metido. Va a ser peor para él que para el club. Este es un incidente aisladísimo, no se expulsa a nadie a lo largo del año. Las sanciones suelen ser mínimas y por tonterías. No se ha sancionado ni al 1% de los 6.000 socios".

Lo cierto es que J.G.S. lo va a tener difícil para no ser expulsado de forma temporal de su club, un lugar donde se presume de que "ser socio implica mucho más que practicar un deporte o pagar una cuota, supone actuar ante la vida con integridad, respeto y honestidad tanto fuera como dentro del campo". Con el reglamento en la mano, solo se prevén dos circunstancias que extinguen de responsabilidad ante una infracción: "El perdón del ofendido, cuando este sea el único ofendido y la infracción no haya ocasionado daños ni perjuicios al Club, ni a terceros" y "el fallecimiento del infractor, salvo la responsabilidad derivada de una posible infracción por daños".

El meme del socio

Los acontecimientos han provocado una riada de reacciones en Twitter, las mayorías asociadas al humor. Otros, como la actriz Leticia Dolera, han analizado el asunto desde una perspectiva más seria. Es más, la actriz tilda de agresión la expulsión de la 'escort' del recinto.

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