La escuela de Tarrasa en la que presuntamente una profesora agredió a una niña por dibujar una bandera de España ha remitido un escrito de respuesta al padre de la pequeña, Francisco Rodríguez Narváez, en el que "lamenta profundamente los hechos ocurridos el pasado 17 de junio, especialmente porque Rocío no volvió al colegio los días posteriores y no pudo finalizar el curso con sus compañeros y compañeras de clase".
En el escrito, al que ha tenido acceso Vozpópuli, la escuela informa haber tomado "una serie de medidas cautelares con el fin de averiguar lo ocurrido".
"Comunicamos los hechos a inspección educativa, realizamos entrevistas a testimonios de diferentes sectores con el objetivo de contrastar las informaciones aportadas por ustedes, analizamos con detenimiento las diversas declaraciones y revisamos todos los trabajos del resto de alumnos del grupo para comprobar si la profesora había mantenido un criterio de neutralidad respecto a las observaciones de corrección, no permitiendo ninguna otra bandera", dice Isabel Guzmán Lázaro, directora de l'Escola Font de I'Alba.
"Como directora del colegio, he señalado en reuniones de claustro que, bajo ningún concepto, la escuela es un lugar para realizar ningún tipo de adoctrinamiento político mediante acciones, discursos o simbologías "
Así, finalmente, "se abrió un Procedimiento Disciplinario a la maestra Miriam" que "ha sido suspendido, el pasado 8 de julio" por la denuncia penal interpuesta por los padres de la niña que ha sido admitida a trámite.
En cualquier caso, desde el día siguiente al incidente hasta concluir el presente curso escolar, la clase de Rocío estuvo atendida por otra maestra del centro, según asegura su directora. Guzmán Lázaro recuerda luego que quiso entrevistarse con la niña pero su madre se negó en dos ocasiones.
Más medidas
La directora del colegio se compromete luego a "renovar públicamente" su compromiso con la obligación de hacer respetar el principio de "no menoscabar la integridad física o moral de los alumnos" por parte de ningún profesional.
"Como directora del colegio, he señalado en reuniones de claustro que, bajo ningún concepto, la escuela es un lugar para realizar ningún tipo de adoctrinamiento político mediante acciones, discursos o simbologías (...) Tenemos un especial empeño en acoger niños y niñas de orígenes y culturas diversas porque estamos convencidas que la diversidad enriquece a los alumnos y los empodera para una sociedad que es cada día más plural y globalizada. No tengo ningún inconveniente en reiterar de nuevo este nuestro compromiso educativo en el claustro del mes de septiembre", esgrime la directora.
Finalmente, Guzmán Lázaro se compromete a "adoptar medidas organizativas para que en el futuro" ninguna de las hijas de los padres afectados coincida con la profesora Miriam F. como tutora. "Apelo a todos estos años compartidos y ruego que no dejemos que los hechos acaecidos empañen lo que hemos construido juntos, familia y escuela, para ayudar a la Rocío en su desarrollo personal".
