Los agentes de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid implicados en el incidente de tráfico de Esperanza Aguirre han declarado ante el juez Carlos Valle que dieron el alto a la presidenta del PP de Madrid en la calle Gran Vía, ratificando la denuncia que dio lugar a la apertura de una causa contra la líder del PP madrileño, han informado fuentes jurídicas.
Un total de siete agentes, cinco de Movilidad y dos municipales, han testificado este lunes ante el magistrado y los abogados personados en la causa en la que se investiga la comisión de un presunto delito de desobediencia. Las comparecencias han arrancado a las 10.30 horas en el Juzgado de Instrucción número 14 de Madrid y se han prolongado hasta las 14.30 horas, sin que ninguno de los agentes abandonara hasta el final la sala de audiencias.
Se trata de los agentes que se vieron envueltos en el altercado con Aguirre, un incidente que pocas horas después llegó a los tribunales madrileños. Tras ratificar sus denuncias, los agentes de Movilidad han señalado que dieron el alto, con las sirenas, a Aguirre, según fuentes jurídicas. No obstante, los abogados han destacado que se han producido contradicciones entre los agentes de Movilidad y los de la Policía Municipal de Madrid.
La versión de Aguirre
En la declaración, Aguirre manifestó que temió que la pudiera "ocurrir algo" al ser un personaje público y al arremolinarse la gente alrededor suyo, dado que los agentes le estaban tomando "los datos con muchísima parsimonia".
En su relato, la líder del PP madrileño narró que ese día se dio cuenta de que "necesitaba dinero", por lo que "al detenerse un taxi, paró y pensó que le daba tiempo". Cuando regresó al vehículo, vio que un agente le estaba poniendo una multa y le dijo que "había estado mucho tiempo". Ella le replicó que "no es cierto" y que "había estado muy poco tiempo".
Tras ello, el agente de Movilidad le pidió su carnet de conducir "a lo que inmediatamente se lo entregó y como lo llevaba en la cartera se lo dio". "El agente estuvo tomando los datos con muchísima parsimonia se lo pidió y lo estuvo mirando y después me pidió la documentación del coche, le di una cartera en la que tengo toda la documentación", contó.
Así, relató que "había muchísima gente" y le dijo que estaban "interrumpiendo la circulación", pidiéndole que por qué no se ponían en una calle "más próxima". "Empezó a llegar muchísima gente y él seguía haciendo no sé que tramites y me dijo que me tenía que dar el resguardo de la multa para recurrir y le dije que no iba a recurrir y que no la quería", agregó Aguirre.
Además, contó al juez que se le hizo "eterno el tiempo" porque la gente empezaba a arremolinarse y "venía de un acto particular". Fue en ese momento cuando temió, según consta en la declaración, "que la pudiera ocurrir algo porque es un personaje público y se arremolinaba mucha gente".