El pasado fin de semana, el primero sin estado de alarma en España tras seis meses y medio de esa figura constitucional para frenar la expansión del coronavirus, registró 12 personas fallecidas en las carreteras españolas en lo que fue el segundo fin de semana más trágico desde mediados de julio de 2020.
El Gobierno decretó el estado de alarma el pasado 25 de octubre para contener la propagación de la covid-19 -enfermedad causada por el último coronavirus-, lo cual se mantuvo durante 15 días y se prorrogó el 9 de noviembre por seis meses más, con lo que concluyó a las 0.00 horas del domingo 9 de mayo.
Por tanto, el pasado fin de semana fue el primero sin estado de alarma tras seis meses y medio. Según la Dirección General de Tráfico (DGT), entre las 15.00 horas del viernes 14 de mayo y las 24.00 horas del domingo 16 de mayo hubo 11 accidentes mortales, en los que fallecieron 12 personas.
El levantamiento de las restricciones perimetrales entre comunidades autónomas hizo que el pasado fin de semana se produjeran 3,6 millones de desplazamientos de largo recorrido en las carreteras españolas (excepto las de Cataluña y el País Vasco, gestionadas por sus gobiernos autonómicos).
Ello supone un 37% más respecto al fin de semana anterior y un 4% más en comparación con un fin de semana equivalente de mayo de 2019, ya que en ese mes de 2020 aún continuaban las restricciones de movilidad por la pandemia del coronavirus.
Segundo peor fin de semana
Según datos de la DGT, recogidos por Servimedia, se trata del segundo fin de semana más trágico en las carreteras durante los seis meses y medio de estado de alarma, sólo por detrás del primer fin de semana de la Semana Santa (entre las 15.00 horas del viernes 26 de marzo y las 24.00 del domingo 28 de marzo), cuando fallecieron 14 personas en las vías interurbanas españolas.
Además, se trata del segundo fin de semana con más fallecidos en las carreteras desde el verano de 2020, concretamente desde el fin de semana del 17 al 19 de julio, cuando murieron 14 personas en las carreteras.
De los 12 fallecidos, seis eran usuarios vulnerables (cinco motoristas y un ciclomotorista). Siete accidentes mortales ocurrieron en vías convencionales y cuatro, en autopista o autovía. Hubo siete salidas de la vía y tres colisiones.
Los siniestros letales tuvieron lugar en La Vall d'Uxió (Castellón), Vinarós (Castellón), Iniesta (Cuenca), Muduex (Guadalajara), Yebra (Guadalajara), Irún (Guipúzcoa), Majadahonda (Madrid), Tres Cantos (Madrid), Ojós (Murcia), Mataró (Barcelona) y Barcelona (Barcelona).