La etarra Inés del Río, de 55 años, ha abandonado la prisión coruñesa de Teixeiro este martes a las 16.25 horas después de que la Audiencia Nacional haya decidido por la mañana su excarcelación por unanimidad en cumplimiento de la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (TEDH).
Una quincena de familiares y amigos de Del Río aguardaban junto a la prensa a las puertas del centro penitenciario de Teixeiro, en Galicia, a la antigua miembro del 'comando Madrid', originaria de Tafalla (Navarra) y encarcelada desde julio de 1987.
Vestida de negro, Del Río ha repartido abrazos y besos entre la comitiva que la aguardaba y ha sido tapada con una enorme ikurriña para resguardarla del aluvión de flashes de fotógrafos y cámaras de televisión. Sin hacer declaraciones, Del Río y sus acompañantes -entre quienes estaba su abogada- han abandonado la zona en cuatro turismos, en el último de los cuales viajaba la hasta ahora presa.
A su salida, se ha escuchado también un contundente "ni olvido ni perdono", proferido por dos personas que, a título particular, sin representar a ninguna organización, se han acercado a Teixeiro. Estos dos hombres, vestidos de traje y con una bandera en la que estaba tachado el escudo, han declarado que lo que pretenden es denunciar que el Gobierno de este país "ha claudicado".
Un fallo "claro y concluyente"
Los 17 magistrados que componen el pleno de la Sala de lo Penal, presidida por Fernando Grande-Marlaska, han acordado la puesta en libertad de Del Río al entender que el fallo del TEDH es claro "y concluyente" y que "desde hoy se consideran extinguidas sus responsabilidades penales por cumplimiento de condena" tras 26 años y tres meses entre rejas.
La Sala, que ha estado reunida durante una hora y media, ha considerado que debe ejecutar esta sentencia porque es firme y de obligatorio cumplimiento. De este modo, Del Río, que debía haber quedado en libertad el 2 de julio de 2008 y que hubiera continuado en prisión hasta 2017 con la Doctrina Parot, ha permanecido 26 años en prisión.
Para adoptar esta decisión, la Sala de lo Penal ha tenido en cuenta el informe de la Fiscalía, que ha considerado que la resolución de Estrasburgo "es clara y concluyente a la hora de indicar la medida requerida para poner remedio al derecho o derechos vulnerados y no es otra que garantizar la puesta en libertad de la señora Del Río en el plazo más breve posible". Recuerdan además el carácter vinculante de la sentencia del TEDH para el Estado, "que adquirió la obligación internacional de dar efectividad y ejecutar las sentencias del Tribunal al prestar su consentimiento al Convenio Europeo para la protección de los derechos civiles y libertades fundamentales".