Las mafias que hacen negocio con la llegada de inmigrantes a España tienen noviembre marcado en su calendario. Ese mes marcará el final de la temporada de pateras y tendrán que buscarse otros beneficios, a buen seguro al margen de la ley. Los vientos favorables que están programados para las próximas fechas serán claves para un nuevo intento de llegada masiva a nuestro país desde las costas de Argelia, según fuentes consultadas por Vozpópuli.
Las cifras de inmigrantes irregulares llegados a España en patera en lo que llevamos de años son más de 21.000, por el aumento que se ha generado por la ruta argelina, según explica a Vozpópuli el portavoz de la asociación mayoritaria en la Guardia Civil Jucil, Agustín Leal. Estas embarcaciones se trasladan hacia el Levante con destinos como Almería, Murcia, Alicante y las Islas Baleares. Uno de los grandes problemas de estas llegadas es que desde la ruptura del pacto de Argelia y España estas personas ya no pueden ser repatriadas.
Sin embargo, la ruta del Estrecho "se ha parado un poco" en contraposición con la inmigración por el Atlántico. Todo ello por el acuerdo del Gobierno con Marruecos que ha intensificado el control en las fronteras. Esas vigilancias se han incrementado en Ceuta y Melilla pero no en Canarias. A las islas llegaron un 27,3% más de inmigrantes en lo que llevamos de año que en el mismo periodo de 2021.
La dureza de Marruecos se contrapone con la tibieza y las complicaciones que se viven desde Argelia. "Estaban haciendo sus agentes su trabajo con gran profesionalidad pero por cuestiones políticas se han reducido sus ayudas", destaca el representante de Jucil.
Las fronteras de Argelia, claves para las mafias
La última gran oleada de inmigrantes se produjo el fin de semana del 9 al 11 de septiembre. Casi 900 llegaron a las cosas españolas desde puertos argelinos. "Es verdad que la mayoría son de Argelia pero se han detectado sirios, yemeníes, paquistaníes, egipcios y tunecinos", advierte Agustín Leal.
Las complicadas relaciones entre España y Argelia han encendido la mecha de los trayectos ilegales en sus puertos. Uno de los principales problemas es la situación geográfica de este país ya que limita con: Marruecos, Mauritania, Malí, Níger, Libia y Túnez. Una amplio abanico de opciones para las mafias que trafican con estos inmigrantes.
Otra de las críticas de Leal tiene su foco en la actuación del Open Arms. El portavoz de Jucil denuncia que el barco de esta ONG traslada a los irregulares de las pateras a España cuando el puerto más cercano es Argelia. Una acción que va contra la legislación actual. "Al final el todo vale es como un efecto llamada si se permite hacer eso", lamenta Leal.
3.000 euros por viajar en patera
Las mafias que se aprovechan de estas personas tienen sus cabecillas fundamentales en los patrones de estas embarcaciones. En los últimos tiempos se ha detectado un aumento de los precios por persona y trayecto. Si el año pasado llegar a España costaba 1.500 euros, la cantidad este veranos se ha incrementado en 3.000 euros.
Para los investigadores de la Policía Nacional y la Guardia Civil es muy complicado llegar hasta estos patrones. En las pateras se guarda una 'ley del silencio' ante el temor de las represalias por parte de los que se quedan en tierra y no arriesgan sus vidas en estos trayectos.
Se buscan a los patrones
Muchos de los inmigrantes que se suben en los barcos no pagan toda la cantidad y mantienen una deuda con las redes internacionales que les llevan hasta España. De ahí viene el miedo a confesar quién es el que manda en las embarcaciones. Los agentes que se encargan de interceptarles se orientan por los dispositivos móviles o los GPS para dar con su identidad.
En los últimos meses también se han acelerado también los procesos judiciales contra los representantes de estas mafias. A pesar de las largas colas que existen en los tribunales españoles, los procesos contra estos patrones se están tramitando en un plazo de un mes. Todo ello con el objetivo de cercar a estos delincuentes y no puedan realizar más viajes.
Año récord de pateras
Al margen de Jucil, otras agrupaciones, como la asociación Independientes de la Guardia Civil (IGC) han mostrado su preocupación "ante las avalanchas de inmigrantes y el desborde que pueden sufrir ciertos servicios". Según sus cifras, en lo llevamos de año, más de 15.000 personas han entrado de manera irregular en España. A Baleares han llegado en torno a 1.350 migrantes, en cerca de 100 pateras, de las más de 800 que han llegado a nuestras costas.
Así, 2022 se convertirá en año récord, según datos ofrecidos por Interior en la ruta canaria, ya que incrementa su entrada un 25%, con más de 10.000 migrantes solo este año. En el trayecto a nuestro país se han dejado la vida 978 personas.