La Fiscalía ha pedido que se declare el secreto de las actuaciones en la causa abierta por espionaje al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Defensa, Margarita Robles. Según informan fuentes fiscales, el Ministerio Público ha pedido al magistrado José Luis Calama Teixeira que acuerde el secreto en este procedimiento que abrió este mismo martes por presunto delito de descubrimiento y revelación de secretos.
La petición de la Fiscalía de la Audiencia Nacional se produce un día después de que el magistrado incoara diligencias en relación a la denuncia interpuesta este mismo lunes por la Abogacía General del Estado. Los servicios jurídicos del Gobierno pidieron a la Audiencia Nacional que investigase las infecciones en el teléfono de Pedro Sánchez y de la ministra Robles con el dispositivo Pegasus entre los meses de mayo y junio de 2021.
El escrito de la Abogacía entró en el Juzgado Central de Instrucción número 4, en funciones de guardia en la Audiencia Nacional. Su titular lo envió a Decanato para su posterior reparto ya que los hechos recogidos en la denuncia ocurrieron hace un año y las normas estipulan que el juzgado que se encuentre de guardia conocerá y asumirá la competencia de "atestados, denuncias y querellas" que se presenten siempre que los hechos hayan ocurrido en el transcurso del periodo de la guardia de dicho juzgado o, al menos, de las 24 horas del viernes anterior.
Espionaje "externo"
Sin embargo, la denuncia terminó recayendo en este juzgado que dirige el instructor al frente de macrocausas como la del Banco Popular o la ya finalizada Emperador, contra Gao Ping. Este mismo martes el magistrado daba luz verde a investigar la denuncia de la Abogacía tras constatar que la competencia para investigar estos hechos es de la Audiencia Nacional y que los mismos podrían ser constitutivos de delito de revelación de secretos.
En lo que respecta a la competencia, el juez indicó que era "meridianamente claro" que corresponde a la Audiencia Nacional investigar este presunto espionaje en tanto es la responsable de investigar los delitos "contra el titular de la Corona, su Consorte, su Sucesor, altos organismos de la Nación y forma de Gobierno". En este caso la denuncia, que acompañaba dos informes del Centro Criptológico Nacional del pasado 30 de abril, se centra en la figura del presidente del Gobierno y de la ministra de Defensa.
El auto del magistrado de este martes aportó, además, detalles sobre este espionaje que no desveló el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, en su comparecencia en rueda de prensa a primera hora del lunes. Entre otros el relativo a que la infiltración en el dispositivo de Pedro Sánchez se produjo el 19 y el 31 de mayo del año pasado. En relación el teléfono de Robles no se aportó la fecha exacta aunque, según consta en los informes del CNI, en la actualidad ninguno de estos móviles presenta indicadores conocidos de infección en curso del software israelí Pegasus.
Comparecencia de Robles en el Congreso
Lo que sí confirmó Bolaños es que el Gobierno tenía la "absoluta seguridad" de que se trató de un ataque externo. En lo que respecta a Sánchez el volumen de información extraído de su móvil fue de 2,6 gigas en la primera intervención, y de 130 megas en la segunda mientras que a Margarita Robles se le extrajeron únicamente nueve megas.
Con todo, las infiltraciones coincidieron con la crisis política desatada con Marruecos a tenor de la entrada furtiva en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali. De hechos, el primer espionaje al teléfono de Sánchez se produjo apenas 48 horas después del asalto masivo de inmigrantes a través de la frontera de Ceuta. El segundo coincidió con la víspera de la declaración en la Audiencia Nacional del activista saharaui. Ese mismo 31 de mayo la Audiencia le reabrió una causa de 2008 por delitos de genocidio y terrorismo, entre otros.
El conocimiento de la existencia de este caso de espionaje -unido al 'Catalan Gate'- ha terminado por propiciar la comparecencia en el Congreso de los Diputados de la ministra de Defensa. Margarita Robles ha querido despejar cualquier sombra de duda sobre la actuación de la directora del CNI, Paz Esteban, y ha dicho al respecto que "está aguantando estoicamente acusaciones que no se corresponden con la realidad".