Tras un largo proceso de negociaciones y de trámites, todo indica que la multinacional portuguesa Altri tiene cada vez más despejado el camino para construir en Galicia, concretamente en el municipio lucense de Palas de Rei, una gran fábrica de fibras textiles a base de celulosa que será la más grande de este tipo en Europa y supondrá una inversión inicial de cerca de 900 millones de euros. La materia prima básica que utilizará será la madera de eucalipto y lo hará con tal ‘voracidad’ que, según las previsiones, ‘engullirá’ casi el 20% del total de los árboles de este tipo que se cortan al año en la región gallega.
La compañía, con sede en Oporto, tiene previsto crear unos 2.500 puestos de trabajo, de ahí el gran interés que ha puesto el Gobierno gallego, que declaró este proyecto como estratégico en diciembre de 2022, en que la operación salga adelante de una vez por todas con el fin de revitalizar el sector industrial en una provincia, Lugo, muy castigada por el desempleo.
Las condiciones que exigía Altri para instalarse en Palas de Rei pasaban por obtener suficiente financiación, además de ayudas directas, a través de los fondos europeos Next Generation y esas negociaciones, según las últimas informaciones que llegan del Ministerio de Industria, parecen estar ya muy encarriladas. La Xunta, mientras tanto, ha movido también ficha sometiendo a información pública la solicitud de autorización ambiental integrada, el estudio de impacto ecológico y la declaración de utilidad pública de la futura fábrica.
La Consejería de Economía acaba de dar luz verde a esos trámites mediante su publicación en el Diario Oficial de Galicia y las alegaciones pertinentes se podrán presentar hasta el 5 de marzo. A finales de 2023, la compañía presentó la documentación necesaria para la tramitación de la autorización ambiental y ahora arranca un proceso burocrático que se prevé muy complejo y cargado de tensión debido al fuerte rechazo que este proyecto provoca en colectivos ambientalistas con mucho peso, como la Plataforma da Ría de Pontevedra, Adega o Ecoloxistas en Acción, que pide impedir la construcción de una planta que, según sus datos, "ocupará tanto terreno como la extensión de Santiago de Compostela" y "precisará de un consumo diario de agua superior" a la que emplea "toda la población de toda la provincia de Lugo en el mismo día".
Un consumo de 640 litros de agua por segundo
¿Cuánto supone ese consumo en datos comprensibles para la sociedad en general? Algunos estudios lo cifran en 640 litros por segundo, que a su vez es el equivalente a 17 piscinas olímpicas al día.
Sobre esta cuestión concreta, el proyecto presentado por Altri incluye un sistema de captación radicado en el embalse de de Portodemouros (Agolada, Pontevedra), con un caudal de 46.000 m3/día. Habrá una estación de bombeo, una estructura flotante y se prevé captar agua potable de pozos de la Finca de Quintas y del río Ulla, entre otras cuestiones.
El proyecto también detalla que la planta tendrá una capacidad de producción anual de 400.000 toneladas métricas de pasta secada al aire anuales y de 200.000 toneladas de lyocel, un tejido artificial y ecológico que se fabrica a partir de pasta de madera. Como materia prima básica se usarán 1,2 millones de metros cúbicos anuales de madera de eucalipto. Se trata de una cifra ‘mareante’ en cuanto al volumen, pues supone prácticamente el 20% de los árboles de esta especie que se cortan cada año en los montes gallegos. En cuanto a los elementos de combustión, la planta contará con una caldera de recuperación de 500 megavatios térmicos, una caldera de biomasa, turbogeneradores, horno de cal y caldera de emergencia.
Para el suministro eléctrico, está proyectada una línea soterrada de más de 9 kilómetros de longitud, con origen en la subestación de Melide (La Coruña), que transcurre también por Palas y Santiso. En cuanto a los vertidos, se estipula que las aguas residuales generadas se tratarán en una estación de tratamiento con un caudal de 30.000 metros cúbicos por día.