Tal y como habían anunciado, los partidos nacionalistas y de izquierdas se han sumado esta mañana en Santiago de Compostela a la manifestación convocada por la plataforma SOS Sanidade Pública para denunciar el grave deterioro que, según los representantes de este colectivo, sufre el sistema sanitario gallego por culpa de la política de recortes del Partido Popular.
La marcha, que ha sido tildada de electoralista por la Xunta, ha reunido en la capital gallega a varios miles de manifestantes, entre ellos los candidatos de las principales fuerzas políticas que se presentan a las elecciones del 18 de febrero, como Ana Pontón, del BNG; José Ramón Gómez Besteiro, del PsdeG; Marta Lois, de Sumar, e Isabel Faraldo, de Podemos, además de varios sindicatos.
Antes de empezar la marcha, que comenzó en la Alameda con el objetivo de llegar hasta la plaza del Obradoiro, los asistentes han coreado consignas como “menos inventos e máis investimentos” (menos inventos y más inversiones); “Rueda, atiende, la sanidad no se vende” o “presupuesto digno para la sanidad pública”. Por su parte, el portavoz de la plataforma convocante, ha denunciado la situación “lamentable” que arrastra desde hace tiempo la atención primaria y las largas esperas que deben soportar los pacientes para ser atendidos. En el ‘desfile’ hacia el Obradoiro se ha podido ver algún ataúd portado por los manifestantes.
El presidente de la Xunta y candidato del PP a la reelección, Alfonso Rueda, ha vuelto a insistir en que se trata de una protesta orquestada con claros fines electoralistas. “Hay partidos que organizamos actos electorales como el de ayer en Pontevedra, con 14.000 personas, con muchísimo ambiente y empuje, y otros partidos que lo que hacen es manifestaciones como campaña electoral", ha declarado el mandatario gallego.
Rueda ha expresado su respeto a la gente "de buena fe" que se ha unido a la marcha de protesta, pero se ha mostrado convencido de que los partidos de la oposición, a los que se refirió como "el multipartito de izquierdas", han utilizando esta convocatoria "como un instrumento claramente electoral, claramente politizado", en plena campaña para los comicios autonómicos del 18F.