El Ministerio de Consumo, dirigido por Alberto Garzón, mediante la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), impulsará la instalación de cámaras de vigilancia en mataderos con el objetivo de incrementar la seguridad alimentaria y el bienestar animal.
Con ese fin ha sacado a consulta pública este martes un proyecto de Real Decreto para obligar a instalar cámaras de videovigilancia en todas las instalaciones de sacrificio animal y garantizar así el cumplimiento de los estándares de bienestar animal, seguridad alimentaria e higiene, tanto de los animales como de las instalaciones en las que se encuentran, según precisó el departamento de Alberto Garzón en un comunicado.
Así, el futuro Real Decreto regulará todos los servicios de videovigilancia en mataderos e incluirá normativa sobre los lugares en los que deben instalarse las cámaras, garantizando la privacidad de los trabajadores.
El texto normativo contemplará también los procesos y tiempos en los que deberán ser guardadas las imágenes y sonidos y el procedimiento de puesta en conocimiento de la autoridad de las posibles infracciones detectadas y regulará las “especificidades” que puedan tener pequeños mataderos y mataderos móviles en cuanto a la aplicación de la norma.
Tras precisar que países como Francia, Alemania y Escocia ya cuentan con protocolos “similares” de vigilancia en mataderos, Consumo subrayó que, aunque en España la normativa regula “de forma estricta” en torno a ellos los marcos de seguridad alimentaria, bienestar animal y la interrelación entre ambas, se siguen detectando “malas prácticas e incumplimientos en relación con el bienestar animal”.
El ministerio aseguró que organizaciones en defensa de los derechos de los animales y de los consumidores, sindicatos o la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice) “apoyan” este tipo de medidas y defendió que la mejora de la protección de los animales en el momento del sacrificio “contribuye a mejorar la calidad de la carne” y tiene un “efecto positivo indirecto” en la seguridad laboral en los mataderos.
Los consumidores demandan información
El departamento de Garzón consideró que los consumidores cada vez demandan más información sobre los productos alimenticios, lo que, a su entender, “incluye las condiciones de los animales” y constató una “creciente sensibilidad” hacia la protección de sus derechos en España.
Por ello, pretende garantizar el derecho de los consumidores a ejercer un “consumo responsable” con la puesta en marcha de una normativa que facilite la “transparencia” en los procesos de producción de productos de consumo.
Según datos del Ministerio de Consumo, en España, en 2019, el sacrificio de ganado porcino se situó en un censo de casi 53 millones de animales mientras que en el sector avícola la cifra superó los 828 millones de aves sacrificadas; en el sector bovino, los 2,5 millones de animales y en el cunícola, por encima de los 41,4 millones. Los sectores ovino, caprino y equino se situaron en 544.000, 94.800 y 38.000 animales sacrificados, respectivamente.