Las elecciones al Consejo de la Policía de los Mossos d’Esquadra mantienen abierta una lucha entre la Administración de la Generalitat y la Justicia ante la mirada estupefacta de algunos sindicatos policiales.
Los comicios se celebraron el pasado día 11 de marzo. El juzgado de Instrucción número 2 de Tarragona decidió anular el voto por correo después de que el sindicato USPAC presentase una denuncia por sospechas de que podía ser fraudulento, algo a lo que el juez da verosimilitud. Las papeletas que están en el punto de mira son unas 1.000, por haber sobre ellas “fundadas sospechas de ilícito penal”. Los resultados dieron una de las principales sorpresas: un sindicato marcadamente independentista, Segcat, consiguió por primera vez sacar un representante.
En la querella admitida a trámite se exponían varios casos en el que los agentes no habían solicitado el voto por correo de manera individual, sino que lo había hecho un delegado sindical, lo que podría constituir un “delito de falsedad”.
En su escrito el magistrado fue claro: las elecciones seguían adelante sin contabilizar el voto emitido a distancia, algo que esgrimió de manera reiterada. Es decir, que los resultados serían válidos. Sin embargo, la Mesa Electoral Coordinadora (MEC) ha intentado maniobrar para, en un primer momento, que se contabilizasen los votos y, en segundo lugar, que se suspenda todo el proceso electoral.
En su escrito el magistrado fue claro: las elecciones seguían adelante sin contabilizar el voto emitido a distancia
En una primera solicitud, del día 13, la MEC solicitó la presencia de un letrado de la administración de justicia en el área básica policial del Cuerpo o que se trasladasen todos los votos por correo a la sede judicial para que se abriesen y recontasen delante del mismo.
Un día más tarde, el magistrado de Tarragona respondió a la MEC diciendo que “no cabe llevar a cabo en este momento el cómputo del voto por correo” y, adelantándose a lo que desde USPAC consideran una “intención descarada de la administración de hacer lo que sea necesario para escrutar el voto por correo”, añadió que su decisión “no afecta al cómputo del voto presencial ni al desarrollo del resto del proceso electoral”.
A pesar de lo expuesto por el juez, el pasado 18 de marzo la Mesa Central publicó un acta en el que se acordaba la “suspensión” del resto del proceso, “incluyendo el escrutinio global y la atribución de los resultados a las candidaturas mientras la autoridad judicial no disponga otra cosa”.
Delegados sindicales
El Consejo de la Policía de Cataluña es el órgano que media en los conflictos colectivos de los agentes. Formula mociones, emite informes sobre proyectos, estudia programas de trabajo. Los elegidos para estar en él son una suerte de delegados sindicales en un organismo compuesto por 16 consejeros representantes de los agentes y otros 16 miembros elegidos por el consejero de Interior.
Para conseguir un delegado, los sindicatos tienen que conseguir un mínimo del 5% sobre el censo, que este año era de 15.237 policías, aunque a penas han votado la mitad (7.637). Así USPAC, que hasta ahora tenía un miembro, ha conseguido cuatro (2.191 votos), desbancando así al que venía siendo la organización mayoritaria, el Sindicat Autònom de Policia, que pasa al tercer puesto con tres delegados.
En segunda posición ha quedado el Sindicat de Policies de Catalunya (SPC), que ha conseguido cuatro representantes con 2.087 votos. La sorpresa la ha dado el Sindicat Nacional de Seguretat de Catalunya (Segcat), una organización de marcado carácter independentista que ha conseguido una silla en el CPC.
En sus perfiles de redes sociales, Segcat comparte convocatorias con otras organizaciones de mossos que buscan una ruptura con España, como son Mossos per la Democracia o Guillaures. Además, según publicó El Confidencial, han recibido el apoyo de la ANC y se sumaron a la llamada a la “huelga general” convocada en Cataluña el pasado 21 de febrero.
Antecedentes
Tanto en el año 2011 como en 2015, distintos sindicatos representativos denunciaron por vía penal y contencioso las elecciones de los Mossos por fraude en el voto por correo. Recientemente se han celebrado los juicios de ambos comicios, que dieron por ganadores al SAP.
Según denuncia el sindicato ganador de este año, las elecciones de 2015 se anularon en 2017, “pero la administración y los sindicato condenado alargaron todos los recursos que pudieron hasta repetirlas a los cuatro años, como si no hubiera pasado nada”.