El exconsejero madrileño Francisco Granados ha negado ante la Audiencia Nacional que fuese puesto sobre aviso por parte de un agente de la Guardia Civil en relación a la investigación de la Unidad Central Operativa contra él por sus negocios con la trama Púnica.
"Este señor lo único que me dice es que están trabajando compañeros suyos trabajando por Valdemoro y alrededor de un centro comercial y unas oficinas por Pinto. Pero no me dice absolutamente nada más", ha asegurado sobre la conversación que mantuvo con el guardia civil José Manuel Rodríguez Talamino en un local de Valdemoro en la noche del 5 de septiembre de 2014.
La Fiscalía acusa a Talamino de haber dado el 'chivatazo' a Granados. "Este señor no me dice nada de que haya una investigación abierta contra mi ni contra nadie", ha proseguido a preguntas de la fiscal Anticorrupción Carmen García Cerdá. Pero el exconsejero madrileño ha calificado el comentario de Talamino como "inocuo", a pesar de que después le trasladase al otro agente también acusado, José Luis Caro, que le había sonado a "advertencia".
Durante el interrogatorio también ha sido preguntado por sus cuentas en Suiza que Granados ya había reconocido durante la instrucción del caso.