El último informe entregado por la Guardia Civil a la Audiencia Nacional en el que desgrana los movimientos del independentismo catalán recoge, también, contactos entre miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR) con familiares de los agresores de Alsasua a dos agentes del cuerpo en un bar de la localidad navarra. Dichos contactos se tradujeron en encuentros populares y “quedadas” en los que ambas partes expusieron sus objetivos comunes contra la “represión” del Estado.
Las pesquisas de los agentes permitieron detectar varios actos que los CDR organizaron como muestra de solidaridad a los agresores de Alsasua, el famoso caso que tuvo lugar en un bar de este municipio en la noche del 15 de octubre de 2016, cuando un grupo de jóvenes se precipitó contra dos agentes fuera de servicio y sus parejas. La Fiscalía solicitó penas por delito de terrorismo para los ocho acusados, aunque la Audiencia Nacional rechazó finalmente estos cargos y les condenó por lesiones y desorden público.
Según las escuchas de la Guardia Civil incorporadas a la causa, un miembro de los CDR, conocido por su papel de interlocución con “organizaciones internacionales revolucionarias” -entre ellas, las FARC-, estableció contacto con familiares de los agresores de Alsasua, con quienes se reunió en Sant Feliu de Guixols, proponiendo “hacer quedadas” entre ambas partes. La llamada intervenida a este miembro de los CDR, de nombre Robert Morral, determina que al nuevo encuentro se sumarían “el propio Robert, la madre de la Anna Gabriel [sic], gente de Altsasu y gente de Arran”.
Otra conversación de Robert Morral con un individuo llamado Jaume revela que el primero está organizando una charla de los CDR con gente de Alsasua “en la que intentará que esté Edurne”, en referencia a una de las madres de los agresores, aunque “cree que no va a ir porque está muy liada”. No obstante, Jaume ofrece la posibilidad de que contacte con otro individuo, de nombre Anxon, para buscar “un posible sustituto para Edurne”: “Tanto Anxon Edurne, comentan Robert y Jaume, son muy cercanos a la izquierda abertzale”.
Dos actos
Los acercamientos entre los CDR y los familiares de los agresores de Alsasua se concretaron, entre otros, en una cena popular “antirrepresiva” en Santa Perpetua, celebrada el 1 de junio de 2019, y que se anunció en redes sociales, cuyas capturas incorporan los agentes al informe.
Con un menú de 12 euros (9 para los niños, incluyendo opción vegana), los asistentes pudieron escuchar la charla de “Robert, uno de los 24 encausados por el TSJC”, las de “los padres de Alsasua, con Edurne Goikoetxea” y del “grupo de Suport Free de Anna Gabriel”
Con un menú de 12 euros (9 para los niños, incluyendo opción vegana), los asistentes pudieron escuchar la charla de “Robert, uno de los 24 encausados por el TSJC”, las de “los padres de Alsasua, con Edurne Goikoetxea” y del “grupo de Suport Free de Anna Gabriel”, así como una carta-saludo de quien fuera líder de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.
El informe de la Guardia Civil recoge otra captura de una convocatoria a un acto celebrado en la localidad barcelonesa de Palau-solità i Plegamans, que también contó con la participación de la citada Edurne Goikoetxea. En este caso se trataba de un “acto solidario” también celebrado en junio de 2019. En este sentido, los investigadores del Instituto Armado destacan el papel de Robert Morral “como coordinador, dinamizador e impulsor” de ambos encuentros.
De los CDR al CNI catalán
Las diligencias aportadas por la Guardia Civil a la Audiencia Nacional -a las que ha tenido acceso Vozpópuli- profundizan en los contactos que mantuvieron diferentes organizaciones separatistas después de los acontecimientos que se vivieron en Cataluña el 1 de octubre de 2017, con la celebración del referéndum ilegal con el que Carles Puigdemont pretendía declarar la independencia unilateral de la comunidad autónoma.
Entre otros extremos, los investigadores aportan las conclusiones de sus pesquisas en torno al llamado CNI catalán, un ente formado por empresarios y miembros de fuerzas de seguridad catalanas que tenía como objetivo la consecución de objetivos comunes independentistas. La Guardia Civil destacaba, como contó este diario, la presencia de un agente de los Mossos d’Esquadra destinado en los servicios de información -con el consecuente acceso a datos sensibles- y uno de los líderes de los CDR.
Asimismo, la Guardia Civil destaca los encuentros que mantuvieron los líderes del CNI catalán con representantes públicos catalanes, incluida Elsa Artadi, así como las conexiones que los CDR establecían entre organizaciones internacionales revolucionarias y parlamentarios autonómicos de la CUP.
Conciencia
Los racistas se suelen entender bien
Urente
Lo gracioso es que en estos aquelarres hablarían en español entre ellos salvo que quisiesen tener un diálogo de sordos, porque no me imagino a estos cavernícolas dominando otra lengua común distinta.
eddo
y Asens paso de frontera a uno de los huidos. ¿¿O no lo sabes??