Podemos quiere abordar la reforma del mercado eléctrico cuanto antes y con decisión. La cúpula de la formación de Pablo Iglesias considera el asunto central en su trabajo de gobierno, aunque admite las limitaciones sobre sus competencias. Los morados creen que el PSOE está frenando y van a subir la intensidad de su presión en el debate público, tanto en prensa como en televisión. El propio vicepresidente Iglesias se prepara para abordar el asunto personalmente con Sánchez si los equipos técnicos fracasan.
“El PSOE está cerrado, pero lo estaba también otras veces y luego se abrió”, comentan fuentes del partido morado. Para que el PSOE “se abra” a reformar el mercado eléctrico, Podemos lanzará una ofensiva pública por tierra, mar y aire en los próximos días, tal y como ha podido saber este diario. Quiere elevar a debate público la discrepancia con el PSOE sobre el precio de la luz. Esperan que la presión generada acabe forzando una solución en línea con lo que plantean los morados.
El partido prevé difundir piezas y tribunas en prensa, además de las tradicionales campañas en redes y televisión, para presionar al PSOE y frenar un repunte récord del precio de la energía en uno de los eneros más fríos de los últimos años. Participarán en dicha campaña pesos pesados del partido como Irene Montero o la ministra de Trabajo Yolanda Díaz. También lo harán los secretarios de Estado Nacho Álvarez e Ione Belarra. También Iglesias está decidido a no dar respiro al PSOE.
"Beneficios caídos del cielo"
Los puntos clave de la batalla se encuentran en la sobrerretribución para las empresas en las tarifas. Se trata de los “beneficios caídos del cielo” (windfall profit, en inglés), es decir la diferencia entre el precio de producción y los beneficios extras fijados en la subasta marginalista de la energía, que, estando fijado al alza, beneficia a las empresas privadas.
Los morados creen que el Gobierno tiene margen de actuación para abordar correcciones cuanto antes. Por ejemplo retocando esos beneficios vía decreto. Recuerdan que el programa de gobierno de coalición firmado hace un año hablaba de "establecer un límite a lo que determinadas tecnologías pueden cobrar en el mercado eléctrico". "La diferencia entre el precio del mercado y ese límite se considerará un ingreso del sistema eléctrico y será destinado, directamente, a abaratar la factura de la luz de todos los consumidores", insistía el documento cofirmado por el PSOE y Podemos.
Hacienda impide reducir el IVA
La segunda clave atañe al IVA sobre el precio de la luz. España es uno de los países europeos con el IVA más alto en este sector (21%), y Podemos está de acuerdo en reducirlo. Sin embargo, fuentes de la formación morada sostienen que el Ministerio de Hacienda de María Jesús Montero no está por la labor. La propia Montero el pasado martes descartó esa opción después de la reunión del Consejo de Ministros.
Podemos trabajará buscando soluciones en las mesas técnicas. Pero Iglesias ha aprendido que a menudo es necesaria su interlocución directa con Sánchez. Así fue con el decreto sobre los desahucios y los suministros: ambas batallas ganadas por el secretario general de Podemos y vicepresidente. Lo mismo puede ocurrir ahora en el caso del precio de la luz, si los ministros socialistas intentan rebajar las exigencias de los morados, advierten desde Podemos.
Reformismo radical
Cabe recordar que durante sus seis años de vida Podemos hizo del tema del precio de la luz uno de sus pilares de lucha social. Y que durante el anterior gobierno de Mariano Rajoy, tanto Iglesias como Sánchez acusaban al Ejecutivo de evitar los repuntes de las tarifas por colusión con las empresas y falta de voluntad. Ahora los dos partidos del Gobierno reciben la misma crítica de la oposición.
Ante la situación, fuentes del partido dejan claramente abierta la posibilidad de que Iglesias intervenga personalmente en este asunto. El líder morado lleva semanas al margen del debate público, pero la sensación es que va afilando la espada. “Va a haber pugna. Es una prioridad, aun sabiendo que no se puede conseguir todo en el tema de la luz”, explican las fuentes consultadas, que, por otro lado, ya dan por perdida la guerra de la nueva empresa pública de energía.
La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en eso ya se ha plantado y la Moncloa está con ella. Podemos renunciará de momento al programa máximo, pero no a un diseño de reformismo radical con el que, entre otras cosas, también quiere desmarcarse del PSOE: “El Gobierno está blindado, pero hay discrepancias legítimas y es bueno que la sociedad española lo vea”.