Queda apenas una semana para que los indignados cumplan cinco años, pero los actos para reivindicar el legado del movimiento popular que agitó España en 2011 parecen no poder aguardar el escaso intervalo de siete días hasta el próximo día 15. Este domingo, media docena de personas han acampado en la plaza de Catalunya de Barcelona para conmemorar un aniversario que vuelve, como ya sucedió hace cinco años, al borde de un periodo electoral.
Si bien este 15M no puede significar lo que significaron aquellas concentraciones, los actos de este año se enmarcan entre la cita electoral del próximo 26 de junio y las acampadas que desde hace semanas se han instalado en la plaza de la República de París y otras plazas de la capital francesa bajo el nombre de la Nuit Debout. Los indignados en Barcelona ya han mostrado su solidaridad con las acampadas francesas y colectivos como GlobalDebout, extensión del '15M francés', estarán presentes en los actos que se celebrarán en los próximos días en Madrid y otras ciudades del territorio nacional.
Hasta la fecha las convocatorias han caído en martes, miércoles, jueves y viernes, mientras que en esta ocasión se realizará un domingo
En esta ocasión, al contrario que en otras convocatorias-aniversario, se unen una serie de factores que pueden incitar a que este 15M la movilización, y por ende la exposición mediática, sea mayor a la de anteriores convocatorias. Para empezar, se trata de la primera vez desde los sucesos del 15 de mayo de 2011 que esta convocatoria tiene lugar en fin de semana. Hasta la fecha las convocatorias han caído en martes, miércoles, jueves y viernes, mientras que en esta ocasión se realizará un domingo, lo que implicará una mayor flexibilidad de asistencia.
En segundo lugar, pese a que el 15M sea un movimiento apolítico, la posible gestación de un frente de izquierdas, en el que se sitúe Podemos, autoproclamado hijo del 15M, puede mejorar la imagen del partido que dirige Pablo Iglesias, en caída libre según las encuestas, al aglutinar el voto protesta de izquierdas contra PP o Ciudadanos.
En tercer lugar, la cercanía de los comicios electorales y el hastío por unos partidos que han dejado al país sin Gobierno por un tiempo ya superior a seis meses, y sobre los cuales no han parado de salir casos de corrupción, día sí y día también. Si bien las nuevas formaciones pueden rascar apoyo como azote del sistema, el hartazgo ante casos o acciones que les equiparan a las formaciones clásicas deja en el aire cómo puede afectar a los partidos este aniversario, aunque probablemente no siente nada bien ni a PP ni a PSOE, en la diana del movimiento ciudadano que salió a las calles hace cinco años.
La movilización puede perjudicar a PP y PSOE, partidos en la diana del movimiento ciudadano que salió a las calles hace cinco años
Por último, las manifestaciones en Francia, que han movilizado al completo a la juventud francesa y ha llevado al presidente François Hollande a mínimos de popularidad a raíz de la reforma laboral 'a la española' llevada a cabo por su Gobierno, puede contribuir a desatar un aniversario de importante significación, que mueva conciencias contra unos u otros y cambie, quizá, el voto de algún indeciso.
Manifestación
De esta forma, el próximo domingo, 15M, coincidirán en Madrid y en otras ciudades españoles, una manifestación, convocada a las 18:00 entre Cibeles y Sol, y la "movilización internacional Nuit Debout", que también tendrá lugar junto a la del 15M. Después se celebrará un micro abierto y una conexión con el resto de manifestaciones. Después, no hay nada especificado. Quizá como ya se intentó en diferentes protestas desde el 15M se intente acampar, algo que no se ha logrado desde la protestas de 2011.
Pase lo que pase, sin duda el quinto aniversario de las protestas del 15M se presenta en el momento más oportuno, tanto, que algunos indignados no quieren esperar para empezar a llenar las plazas.
