El magistrado José Luis Calama Teixeira ha levantado el secreto del caso Pegasus, que se sigue en la Audiencia Nacional, y ha citado a declarar en calidad de testigo para el próximo 5 de julio al ministro de Presidencia, Félix Bolaños. Su comparecencia se producirá después de haber escuchado en sede judicial a la exdirectora del CNI Paz Esteban, la cual ya ha comparecido en este procedimiento en el que se investiga el espionaje del teléfono móvil del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Según informan fuentes jurídicas, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 ha acordado también ampliar la comisión rogatoria cursada a Israel para que una comitiva judicial encabezada por él mismo se desplace al país. El objetivo es tomar declaración en calidad de testigo al CEO de NSO Group, la empresa que comercializa con el sofwtare Pegasus.
Cabe destacar que en este tiempo el magistrado ya dirigió una comisión rogatoria a Israel para que informara sobre distintos extremos de este programa que habría sido utilizado para infectar los teléfonos de Pedro Sánchez y de la ministra de Defensa, Margarita Robles. De hecho, esta fue una de las primeras diligencias que acordó Calama cuando decidió admitir a trámite la denuncia interpuesta por la Abogacía General del Estado, además de solicitar más documental al CNI sobre este asunto, tal y como informó este medio.
Paz Esteban declaró el viernes
Tras incoar diligencias para investigar estos hechos por presunto delito de revelación de secretos, el magistrado acordó el secreto de las actuaciones, accediendo de este modo a lo solicitado por la Fiscalía de la Audiencia Nacional. El instructor alegó entonces que había que proteger las pesquisas ya que se trata de un asunto de carácter sensible "que puede comprometer gravemente la seguridad del Estado".
Lo primero que hizo fue solicitar información a la agencia que está detrás de este programa de espionaje y también requerir más documentos al CNI. Del mismo modo pidió al Ejecutivo desclasificar documentos sobre este episodio en aras a poder citar tanto al funcionario del Centro Nacional de Inteligencia encargado de elaborar los informes sobre este asunto como a la propia Paz Esteban. Según las mismas fuentes, la exdirectora del CNI (que fue cesada por el supuesto espionaje a independentistas catalanes) declaró este mismo viernes.
El objetivo de los investigadores es esclarecer cómo y de qué forma se produjeron las infecciones al teléfono de Sánchez y Robles hace ahora un año. Precisamente fue el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, la persona que dio a conocer estos hechos el pasado 2 de mayo. En plena crisis por el supuesto espionaje desde el CNI con este programa a líderes independentistas catalanes, el ministro convocó una rueda de prensa de urgencia para explicar que Sánchez también fue víctima de espionaje con este programa.
Caso Pegasus: un mes bajo secreto
Bolaños dijo entonces que tenían la certeza de que se habían hackeado estos dos móviles el año pasado. Según expuso, el teléfono de Sánchez fue intervenido hasta en dos ocasiones en mayo (los días 19 y 31 de dicho mes) mientras que el de la ministra una vez en junio. El volumen de información extraído del móvil del presidente fue de 2,6 gigas en la primera intervención, y de 130 megas en la segunda. A la titular de Defensa se le extrajeron apenas nueve megas
Por ello anunció que la interposición de una denuncia por parte de la Abogacía General del Estado en la Audiencia Nacional. La misma recayó en el Juzgado Central de Instrucción número 4 por ser el que estaba en funciones de guardia. La mandó a reparto y volvió a recaer en el mismo. Calama acordó el secreto avanzando ya que lo mantendría únicamente el tiempo que fuera estrictamente necesario y ofreció también acciones a Sánchez y Robles para que se personaran en la causa como perjudicados.
Hackeo y crisis con Marruecos
El objetivo es esclarecer cómo se produjo la infección con Pegasus y quien estaría detrás de la misma. Aunque Bolaños no se pronunció sobre este último aspecto, lo cierto es que los hackeos se produjeron en plena crisis con Marruecos por la avalancha migratoria en Ceuta. En concreto, la primera de las intromisiones alertadas por el CNI se produjo apenas 48 horas después del asalto masivo de inmigrantes a través de la frontera de Ceuta.
La segunda de las intervenciones tuvo lugar el 31 de mayo. Ese día el presidente del Gobierno ofreció una rueda de prensa para responder a las acusaciones de Rabat acerca de que se estaba fomentando el separatismo. Sánchez expuso entonces que era "inaceptable" que Marruecos atacase Ceuta por "discrepancias" con el Sáhara y las relaciones bilaterales quedaron dañadas.
El telón de fondo que llevó a actuar de esta forma a Marruecos fue la entrada furtiva en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, para ser tratado de covid. Este mismo martes tienen previsto reunirse las delegaciones de ambos países para acordar la reapertura total de las fronteras de Ceuta y Melilla.
