El juez de Vigilancia Penitenciaria de Valladolid que ha otorgado a Iñaki Urdangarin un permiso para salir de prisión a un centro de discapacitados dos días por semana le prohíbe “terminantemente” que aproveche esta circunstancia para mantener contacto con sus familiares y allegados.
Así consta en un escrito remitido este viernes por el magistrado a la cárcel de Ávila en la que el ex duque de Palma cumple condena por el caso Nóos. “Queda terminantemente prohibido cualesquiera comunicación con los familiares en el horario establecido de salidas, incluidas las llamadas telefónicas u otros medios de similar eficacia, incluido mensajería (WhatsApp, Skype…)”, dice el documento al que ha tenido acceso Vozpópuli.
Se trata de una providencia en la que el juez le pide al centro penitenciario que le informe de estas instrucciones al preso. Para comunicar con personas del exterior, tendrá que seguir sometido a la normativa de la cárcel de Brieva (Ávila), donde cumple condena en solitario.
No puede salir solo del centro de voluntariado
Tampoco puede salir de las instalaciones del Centro Hogar Don Orione “salvo en caso de acompañamientos de las personas a su cargo en sus paseos por las inmediaciones”. Urdangarin deberá comer en el centro también.
Este juez de vigilancia le ha otorgado al marido de la infanta Cristina este permiso de salidas en virtud del artículo 117 del Reglamento Penitenciario. No exige haber disfrutado antes de permisos o haber cumplido un cuarto de la condena, aunque sí consensuar previamente con la cárcel el tipo de programa a desarrollar.
En este caso no se hizo y el juez aceptó el centro propuesto por el preso, en Madrid y sin experiencia previa de colaboración con Instituciones Penitenciarias. Esta providencia del juez se produce un día después de que el responsable de Don Orione declarase ante los medios que Urdangarin podía recibir visitas y salir del centro. El juez ha dicho que no.
