El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha asegurado que, sobre el desafío soberanista catalán, el Ejecutivo comunitario se atendrá a lo que digan las Cortes españolas y el Tribunal Constitucional.
"Yo sigo la línea de la Comisión Prodi y Barroso. La Comisión Europea siempre ha pensado que debemos escuchar atentamente lo que dicen el Tribunal Constitucional y las Cortes españolas. Me reafirmo en esa posición", ha dicho en una entrevista con varios medios europeos, entre ellos La Vanguardia.
Además, ha desvelado que el colegio de comisarios ha estudiado y hablado del tema "en varias ocasiones", y esa ha sido su conclusión: "Cortes y Tribunal Constitucional". "¿Quién soy yo para decir que las decisiones que ha tomado la máxima instancia judicial española y el Parlamento español son irrelevantes?", ha proseguido.
Y ante los independentistas que denuncian que prohibir el referéndum del 1-O demuestra una falta de libertad de expresión en España, ha respondido que "esto no tiene nada que ver con la libertad de expresión y de conciencia" y que "en la UE todo el mundo es libre para de decir lo que quiera mientras no se salga del carril de las leyes básicas y valores de la democracia". Para Juncker, "ese es el conflicto", una disputa que "afecta a España".
Y ha dejado claro que si Cataluña finalmente se independizase, "todo el mundo debe saber" que para ser miembros de la UE "se sometería a las normas y procesos habituales. Es decir, negociaciones de adhesión". "En nombre de la Comisión Europea, tengo que recordar lo que ya hemos dicho en el pasado", ha remachado.
Eso sí, ha querido puntualizar que no tiene la independencia como hipótesis de trabajo: "No digo que sea mi hipótesis de trabajo ni que no lo sea, porque sobre este tema no tengo ninguna".