De avezado inversor a víctima de los productos tóxicos bancarios. Luis Bárcenas, que en sus comparencias como imputado ante el juez Pablo Ruz ha utilizado reiteradamente el argumento de ser un experto en bolsa para justificar los millonarios saldos de sus cuentas suizas, también picó con las participaciones preferentes, con las que perdió algo más de 12.000 euros. Fue en 2011, cuando invirtió 40.000 euros en dos emisiones realizadas en el verano de aquel año por Banca Cívica. Hoy, ese dinero se ha convertido en acciones de Caixabank cuyo valor no llega a los 28.000 euros. Así lo detalla un informe del Servicio de Prevención del Blanqueo de Dinero (SEPBLAC) del Banco de España que ha servido a la Fiscalía Anticorrupción para pedir el embargo de cinco cuentas que el exsenador tenía en Caixabank, entre ellas en la que tiene depositados los 'restos' de su inversión.
Cuando el extesorero del PP adquirió las preferentes, la entidad financiera prometía rentabilidades del 8,65%. Al final ha perdido un 30%
El documento de los expertos del Banco de España detalla que Bárcenas realizó la inversión desde un depósito abierto el 8 de junio de 2011 en la sucursal que la Caja de Navarra (hoy integrado en el grupo Caixabank) tiene en la madrileña calle de Juan Bravo. Dos días después, el extesorero transfería a ésta 40.000 euros procedentes de otra cuenta de la que era también era titular, en este caso en el Banco Popular. Esa misma jornada, abría en Caja de Navara una imposición a plazo fijo por el total del capital traspasado, en la línea de lo que manifestó en su última declaración ante el juez Ruz: “No me gusta que el dinero esté nunca ocioso”.
De hecho, esa imposición fue sólo para veinte días, ya que el 30 de junio la canceló tras conseguir unos beneficios de 72 euros. El motivo: adquirir durante los dos meses siguientes, julio y agosto, participaciones preferentes de Banca Cívica. En total, invirtió 39.914 euros atraído, seguramente, por el alto interés que aún entonces prometía la entidad bancaria a los interesados en estos productos: nada menos que un 8,65%. Sin embargo, el producto tóxico bancario terminaría pasando factura al extesorero del PP como a tantos ahorradores. Finalmente, Caixabank canjeó las mismas por acciones del grupo financiero. Eso sí, el valor de éstas era sensiblemente inferior a la inversión cuando el SEPBLAC elaboró hace unos días el informe: 27.648,74 euros. Un 30% menos del capital inicial.
La fallida inversión en lingotes
No es la primera vez que la investigación de la trama Gürtel destapa un patinazo del 'avezado inversor' Bárcenas. De hecho, el exsenador perdió en 2010, cuando ya estaba imputado en la causa, cerca de 60.000 euros en la compraventa de 28 lingotes de oro. Nada menos que 56 kilos del metal precioso por los que pagó 1,2 millones de francos suizos (cerca de un millón de euros) y de los que se desprendió menos de dos meses después por 1,1 millones. "No recuperó con la venta lo invertido en la compra", destacaba en un informe reciente la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía sobre dicha operación.
Aquella 'poco rentable' compra la realizó el 17 de mayo de aquel año a través de una subcuenta en francos suizos que Bárcenas poseía en la entidad financiera SYZ bajo la titularidad de la empresa panameña fantasma Granda Global, propiedad de su testaferro español, Iván Yáñez. A los once días de la adquisición, el extesorero se desprendió de uno de los 28 lingotes, por lo que se embolsó 44.450 francos suizos (36.000 euros). Con ello consiguió un pequeño beneficio: 211 francos suizos (171 euros). Sin embargo, cuando el 5 de julio vendió las 27 piezas restantes el resultado fue muy distinto: perdió 73.484 francos suizos (59.670 euros).