La bebé diagnosticada con malaria en el Hospital Universitario de Móstoles (Madrid), que no había estado en zonas endémicas del virus, contrajo esta enfermedad durante su estancia en el centro sanitario al ser contagiada por otro paciente con el que compartió planta y que la había adquirido en otro país.
Así consta en el informe del grupo de expertos de la Dirección General de la Salud Pública sobre el caso de la bebé de tres meses notificado el pasado 27 de febrero y que se encuentra en su domicilio "restablecida y curada de forma completa", al igual que el paciente que la contagió.