El secretario general de UGT Madrid, Luis Miguel López Reillo, ha dimitido de su cargo este martes, días después de denunciar a la Policía una trama de corrupción en el sindicato, según ha comunicado en un mensaje de Twitter a los afiliados.
En su tuit, según han informado a EFE fuentes sindicales, López Reillo afirma que dimite por "responsabilidad política y dignidad personal" y explica que proseguirán "las investigaciones policiales para esclarecer los hechos".
El sábado pasado, el diario El Mundo informaba de que López Reillo había denunciado ante la Policía Nacional un posible caso de corrupción en el sindicato, que podría haber desviado al menos un millón de euros del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa). López Reillo habría sido advertido por analistas económicos cercanos al sindicato que detectaron presuntas irregularidades en la gestión de estos fondos, por lo que él mismo llevó ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado estos indicios.
Según informaciones periodísticas, en la trama corrupta estaría presuntamente implicada una administrativa del sindicato, hija de la parlamentaria del PSOE de la Asamblea de Madrid Carmen López, y entidades bancarias que gestionaban los fondos de dinero público destinados a empleados despedidos.
Objetivos truncados
López Reillo, de 66 años, fue elegido secretario general de UGT Madrid el 6 de mayo de 2016 en el XIV congreso de UGT madrileño. El hasta ahora secretario general se enfrentaba a su segundo mandato de cuatro años al frente del sindicato y había marcado como uno de sus ejes de su gestión conseguir acabar con la brecha salarial y que los planes de igualdad llegaran a todas las empresas. Junto a ello también había señalado el aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), la derogación de la reforma laboral y el aumento de las pensiones como objetivos de este nuevo periodo, ahora truncado.