La Comunidad de Madrid solicitó el ingreso en prisión provisional para la madre de Colmenar Viejo (Madrid) acusada de maltratar a sus hijos por incumplir las medidas cautelares que le fueron impuestas. El juzgado que se encarga de instruir este caso, en el que también está implicado su marido, un médico del Gregorio Marañón, rechazó tras la vista la petición del Gobierno regional, según un auto al que ha tenido acceso Vozpópuli.
La comparecencia para analizar esta solicitud se desarrolló este miércoles en el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número 4 de Colmenar Viejo. Este magistrado investiga al padre y a la madre de los ocho niños por un delito de violencia doméstica y de género y maltrato habitual.
La acusación particular, que ejerce la Comunidad de Madrid, se interesó por la prisión provisional comunicada y sin fianza para esta mujer considerando la "necesidad de proteger a la víctima con relación a los hechos". "En concreto por el quebrantamiento de medida cautelar impuesta en su día y que vendría a dibujar la ineficacia del mismo", según el auto. La Fiscalía no se interesó en la agravación de la medida.
Se puso en contacto con una de las menores
Finalmente, el juez decidió que no procedía agravar la medida cautelar acordada por auto el pasado 6 de diciembre de 2023 y denegó la petición realizada por el Gobierno regional. El magistrado considera que se trataría de un "hecho puntual".
Esta madre quebrantó la medida cautelar porque se comunicó con uno de sus menores que se encuentra bajo la tutela cautelar de una institución pública. "Una institución pública que, sin duda, puede y debe fiscalizar las llamadas que la menor recibe y las personas que tratan de contactar con ella", reprocha el magistrado en el auto.
A pesar de ello, el juez avisa en el documento a la madre de Colmenar que esta medida se podría contemplar si se reiteran los "indicios de nuevos presuntos incumplimientos" de las medidas que ha decretado. Incluso la prisión provisional.
La mujer del médico del Hospital Gregorio Marañón negó hasta en nueve ocasiones haber maltratado a sus hijos menores en la casa de Colmenar Viejo (Madrid). "Yo ya declaré todo lo que tenía que declarar sobre ésto", argumentó a la décima vez que escuchaba la cuestión.
"Discutir, discutimos, pues como una familia normal. El motivo pues no lo sé, yo ya no sé, yo discuto con ellos pues como madre que soy y él como padre que es, pero por el bien de los niños, si hacen algo mal", aseguró ante el juzgado. A continuación, relató que hay libros con "contenido erótico" que no les permiten leerlo y que "a veces les hemos dejado la televisión pero cosas adecuadas a su edad·.
El caso de Colmenar
El Juzgado de Instrucción número 4 de Colmenar Viejo sigue al frente de las diligencias del procedimiento. De los ocho menores, solo tres denunciaron el presunto maltrato. En las primeras exploraciones estos niños confesaron haber sufrido agresiones físicas y verbales. Sin embargo, en las segundas declaraciones ante el juez, una de las hijas dijo haber sufrido un episodio de agresión sexual.
La menor afirmó que entre febrero y marzo de este año su padre le había obligado a ver películas porno y a representarlas. También aseguró que le había explorado sus partes íntimas para asegurarse de que no había mantenido relaciones. Por el momento no se han recabado pruebas sobre este suceso en Colmenar y el juez no incluye este entre los delitos investigados al padre.