Vejaciones y empujones. Ese es el maltrato que sufrían a diario algunos de los menores de unos cuatro años de la guardería Pecas de Pozuelo de Alarcón. La presunta autora de estos hechos es una de las monitorias que más llevaba en el centro. La UFAM de la Policía Nacional revisa las grabaciones de los últimos dos meses para comprobar si hay más víctimas de esta mujer. Por su dilatada trayectoria en la escuela, los agentes sospechan que estas prácticas se podría prolongar en el tiempo, según informan fuentes de la investigación a Vozpópuli.
La difusión de la noticia en los medios de comunicación desató una gran polvareda entre las familias de los inscritos en el centro. Solo seis de ella conocían los episodios de maltrato por boca de la Policía Nacional, que se puso en contacto con los padres de las víctimas identificadas. Todos tienen alrededor de cinco años, los mayores de la infraestructura.
Otros de los usuarios de la guardería acudieron en busca de información y recibieron la misma consigna: "No tenemos ni idea, hay una investigación abierta". Esa manifestación es similar a la que dieron los responsables del centro a los investigadores de la UFAM de Pozuelo de Alarcón.
La dirección vigilaba el sistema de cámaras
Los dueños afirmaron que no tenían conocimiento de los episodios de maltrato. Nunca habían recibido quejas por parte de los padres y tampoco habían presenciado nada. Llegaron a señalar que en caso contrario la hubieran despedido en el momento.
Una de las características de la guardería, que ellos mismos promocionan en su página web, es que en todas las zonas, tanto interiores como exteriores, están en funcionamiento las 24 horas del día cámaras de videovigilancia. "Nos permiten ejercer, desde Dirección, un control total de todo lo que está acaeciendo dentro de nuestras instalaciones. Estas grabaciones cuentan con la autorización y agradecimiento de todo nuestro equipo, por lo que supone de tranquilidad y valor añadido al ejercicio de su profesión", defienden.
Empujones y vejaciones
Precisamente, estas imágenes son las que están analizando los agentes de la Policía Nacional. Se han remontado a dos meses atrás para intentar captar el supuesto maltrato que ejercía esta cuidadora, según informan fuentes de la investigación a Vozpópuli. Los funcionarios sospechan que podría haber más de una decena de víctimas a tenor de la experiencia en el centro de la principal implicadas.
Los episodios de maltratos son principalmente insultos y vejaciones a los menores de tan solo cinco años. Decía de forma despectiva a los niños que sus padres eran "unos ricos". Les hablaba mal a la hora de la comida y también se ha detectado empujones y malos modos.
Llevaba 20 años en el centro
La secuencia fue captada en un video de diez minutos de duración por una joven que trabajaba en prácticas en la guardería. Se indignó al verlo en otras ocasiones y decidió denunciar las prácticas de esta empleada veterana. La principal implicada se llama Begoña y llevaba casi 20 años trabajando en el centro.
El archivo lo adjunto en una denuncia que presentó ante la Policía Nacional de Pozuelo de Alarcón. Los agentes de la UFAM se hicieron cargo de la investigación. En pocas semanas, el pasado 23 de noviembre, detuvieron a dos empleadas. La veterana que presuntamente realizaba las vejaciones y a otra empleada que las ocultaba.
Las diligencias han permanecido ocultas hasta este jueves que ha levantado el secreto del sumario por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Pozuelo de Alarcón. Se investiga a las dos monitoras por los presuntos delitos contra la integridad moral y lesiones. Una como autora y otra por no denunciar los hechos.
Hace una semana, las dos trabajadoras quedaron en libertad pero sobre la principal encausada se decretó una orden de alejamiento de 500 metros sobre los menores identificaciones por la Policía y su prohibición para ser docente. La otra mujer no tiene medidas cautelares, según fuentes jurídicas. Eso sí, las dos están suspendidas de empleo y sueldo.
La versión de la guardería
Los agentes ahora centran sus esfuerzos en revisar las cámaras de seguridad para identificar a más víctimas. También tomarán testimonio a los principales implicados: los responsables del centro, las familias y las trabajadoras, según estas fuentes. No se descartan más detenciones si demuestran que más personas conocían los episodios de maltrato infantil.
Fuentes de la guardería han explicado a Vozpópuli que el principal objetivo de la dirección es el "bienestar de los niños y de sus familias, y es la primera interesada en el esclarecimiento de estos hechos". "Por ello, desde el primer momento hemos prestado nuestra total colaboración a las autoridades. Tras la notificación de estos hechos se ha estado en contacto con las familias para ofrecerles información y reiterarles que estamos a su disposición", han subrayado.
Vídeos sin sonido
Uno de los padres que tiene a su hijo en el centro ha explicado a Vozpópuli que el suceso les ha sentado como "un golpe en la cara". "La guardería siempre nos ha tratado como una maravilla. Los niños van encantados y contentísimos cada día. Nunca hemos tenido un problema", ha narrado.
La mujer de este progenitor habló con la directora de la guardería. La responsable les comentó que la Policía había pillado las cámaras de seguridad. El principal problema, según explica, es que no tienen sonido y por lo tanto no se podrían escuchar las vejaciones como en el archivo que grabó la trabajadora. Lo que sí se podrá discernir es si hubo empujones y maltrato físico.
La guardería de los futbolistas
En esta guardería de Pozuelo de Alarcón se encuentran inscritos bebés de futbolistas del Atlético de Madrid como Griezmann, Álvaro Morata, Saúl o Mario Hermoso. También hay niños de cantantes y empresarios. El artista Huecco tiene en el centro a dos vástagos. Muchas de las familias decidieron no llevar a sus hijos este jueves al conocer la noticia por los medios de comunicación. El precio medio por menor oscila entre los 300 y los 700 euros y atienden desde bebés a niños de 3 años.
Este centro se promociona en redes sociales como un espacio natural de 3.000 metros cuadrados, diseñado para conseguir un "entorno estimulante y seguro que potencie el desarrollo saludable". "El prestigio (premiado por Anuario Guía) está respaldado por la gran experiencia de nuestro personal docente altamente cualificado y avalado por las opiniones de centenares de padres que han confiado en nosotros", resaltan desde la guardería.
Pontevedresa
¡Qué grado de vileza y de maldad hay que tener para maltratar a niños, da igual que sean hijos de futbolistas o del empleado de la limpieza que limpa su calle, los niños son sagrados, y hay que tratarlos con afecto y con cariño. Todas las guarderías deberían tener filmaciones de lo que ocurre dentro porque la condición humana ha empeorado muchísimo y ya no se puede uno fiar de nadie. Lo mismo en las residencias de ancianos, donde en muchas hay malos tratos.
Elfachapobre
Vamos que los ricos también lloran en Madrid, vaya cortijo de los del PP/VOX