Una persecución policial salvó la vida a un joven repartidor de Uber en la M-40. Los agentes de la Policía Nacional observaron como el chico acababa de sufrir un accidente de tráfico con su moto y pararon en su auxilio. El impacto con una furgoneta provocó que la pierna de la víctima pendiera de unos pocos tejidos pero su rápida intervención, gracias al uso de un torniquete, ha permitido no solo que el hombre salvara su vida sino que también tenga la esperanza de poder recuperar su extremidad, según informan fuentes policiales a Vozpópuli.
El suceso se remonta a la madrugada del viernes al sábado en Madrid. El reloj marcaba las tres de la mañana cuando dos agentes del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC) de Hortaleza patrullaban por la M-40 realizando labores de seguridad. En un momento dado comprobaron que varios vehículos circulaban a gran velocidad y siguieron sus pasos por el kilómetro 8,500 en dirección sur.
Lamentablemente, los policías perdieron la pista de estos coches pero observaron como un hombre pedía auxilio a la altura de la salida 9A y 9B, la que conduce al Wanda Metropolitano. Esta persona era el conductor de una furgoneta contra la que había impactado un joven motorista de 25 años que se encontraba malherido.
El estado del motorista herido
La víctima, era un repartidor de Uber que acababa de salir de trabajar, estaba reptando por el suelo con "agonía, angustia y lloro". Los agentes rápidamente se dieron cuenta de la gravedad de la situación ya que tenía la pierna izquierda semiamputada.
Sin pensarlo, los policías sacaron del maletero del vehículo policial dos botiquínes personales. Uno de ellos colocó un torniquete en la parte superior de la pierna al trabajador de Uber mientras que su compañero llamó al 091 para pedir refuerzos urgentes por la fractura abierta de pierna.
Este aviso lo enviaron a las 3.10 horas y a los pocos minutos se personaron en la zona refuerzos policiales, también de la Guardia Civil y los sanitarios de Samur-Protección Civil. El repartidor de Uber fue trasladado apenas quince minutos después al Hospital de La Paz con pronótico moderado grave.
La pierna del repartidor de Uber
Los médicos de este centro sanitario en principio dijeron que la pierna no se podía salvar. Sin embargo, nuevas exploraciones ese mismo sábado apuntaron que la extremidad tenía algo de sensibilidad y fue trasladado rápidamente a un quirófano para reconstruirla.
El detonante del accidente, según ha reconocido el propio motorista, fue que se equivocó de salida y cruzó por la intersección. No vio a la furgoneta y colisionó con la misma de forma lateral lo que provocó el duro impacto en la pierna. A día de hoy, el trabajador de Uber se encuentra recuperándose de la operación en La Paz. La actuación heróica de estos policías de Hortaleza le ha proporcionado una nueva esperanza.