El jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, han acordado este lunes que los equipos de sus respectivos partidos inicien conversaciones para analizar la situación política y explorar fórmulas que permitan que la legislatura eche a andar y sea posible la gobernabilidad de España.
Durante su charla, que ha sido breve, según las fuentes, el presidente del Gobierno en funciones y el líder del cuarto partido en representación parlamentaria en el Congreso han convenido en que las conversaciones se inicien cuando concluya la segunda ronda de contactos que va a mantener el Rey con los diversos dirigentes políticos. Esa ronda comenzará a partir del próximo miércoles después de que Felipe VI haya recibido este lunes al presidente del Congreso, Patxi López, encargado de hacerle llegar el nombre de los representantes de los diversos partidos que acudirán al Palacio de la Zarzuela.
Rivera ha trasladado a Rajoy la necesidad de mantener contactos para contrastar los puntos de coincidencia y las discrepancias entre sus respectivos partidos
Según Ciudadanos, Rivera ha trasladado a Rajoy la necesidad de mantener contactos para contrastar los puntos de coincidencia y las discrepancias entre sus respectivos partidos. En cualquier caso, el líder de Ciudadanos ha defendido la necesidad de que en esta legislatura se lleven a cabo las "profundas reformas" que considera que necesita España. Rivera tiene intención de hacer con el PSOE lo mismo que con el PP, algo que prevé trasladar al líder socialista, Pedro Sánchez, cuando hable con él, previsiblemente en las próximas horas. Por ello, Ciudadanos pretende que haya también reuniones entre representantes de este partido y del PSOE una vez que finalice la segunda ronda de contactos del Rey.
El presidente de Ciudadanos calificaba este mismo lunes de "irresponsable" la actitud tanto de Mariano Rajoy como de Pedro Sánchez de "tirarse la pelota uno al tejado del otro" y ha urgido a uno de los dos a "proponer y liderar una negociación" para intentar ser investido presidente. "Lo que espera España es ver quién da el paso adelante para abrir conversaciones con los demás partidos", advertía Rivera, para quien Sánchez debería haber dado ese paso tras la renuncia temporal anunciada por Rajoy.
Además, Rivera ha subrayado su rechazo a "poner la economía de España en manos de Podemos" y a un ministerio de la Plurinacionalidad, que serviría "para dinamitar la unidad y la unión de los españoles". Su modelo -ha reiterado- es el diálogo con el PP y el PSOE, las fuerzas constitucionalistas que junto con Ciudadanos representan al 70 % de los españoles -dice-, porque "España necesita un cambio, pero un cambio a mejor, no a peor".