No quieren ver a Ruiz-Gallardón ni en pintura, comentan en fuentes del PP. Es el ministro menos requerido por las bases y los comités regionales del partido para animar los mítines y actos electorales en la campaña de las europeas. A falta de candidato, asunto que ha pasado ya a un segundo plano del interés informativo, los estrategas de Génova recurren a miembros del Gobierno como 'gancho' en los encuentros con las bases.
Los comités autonómicos envían sus sugerencias al equipo central de la campaña, para sugerirles la presencia de miembros del Ejecutivo en sus respectivos actos. Carlos Floriano es el coordinador general del PP para esta cita europea que supone el primer 'test' para el Gobierno desde su llegada al poder. El PP se presenta como el mejor partido para defender los intereses de España en la UE. El PSOE, por su parte, busca alentar el voto de castigo a Rajoy además de convertir las elecciones en una evaluación a la labor del Gobierno.
"En horas bajas"
El ministro de Justicia figura a la cabeza de los menos solicitados, junto al de Cultura y al de Interior. Gallardón produce cierto rechazo ya que su presencia va acompañada de la polémica por el proyecto de ley de reforma del aborto, que ni siquiera entre la militancia del PP ha sido bien recibida. Pese a que el titular de Justicia es uno de los políticos más conocidos y con mayor relevancia política del equipo de Rajoy, atraviesa por un momento de complicada aceptación social, como se comprueba habitualmente en los sondeos demoscópicos. Aspirante sempiterno a la presidencia del Gobierno, Gallardón ha perdido la confianza de Rajoy y mantiene unas relaciones poco fluídas con algunos compañeros de Gabinete. "Está en horas bajas", susurran en Génova. "Y parece irrecuperable".
Tampoco José Ignacio Wert goza de las simpatías de la militancia 'popular', aunque no resulta tan abiertamente antipático como su colega de Justicia. De hecho, el titular de Cultura es recibido con cierto cariño y respeto en algunas comunidades en las que se simpatiza con su empeño en sacar adelante su Ley de Educación.
Una llamativa excepción
Jorge Fenández Díaz se prodigará fundamentalmente en Cataluña, de donde es oriundo, aunque su perfil pasa muy inadvertido, hecho que le produce enorme contrariedad. De hecho en las encuestas del CIS es el segundo ministro menos conocido de todo el Gobierno, por detrás tan sólo de Pedro Morenés, titular de Defensa y casi inexistente. Fernández Díaz está al frente de una cartera que generalmente catapultaba a sus titulares a las cimas de la popularidad. Mayor Oreja fue un ejemplo paradigmático.
Sin embargo en Interior se suceden demasiados episodios polémicos, piedra de debate y de controversia. El anunciado proyecto de Ley de Seguridad Ciudadana, puesta en cuarentena por instancias judiciales, la denostada gestión de los dramáticos sucesos de Ceuta y Melilla y, finalmente, la impotencia mostrada frente a la violencia salvaje que se adueñó el sábado de las calles de Madrid, son algunos de los 'puntos negros' de su gestión.
La cita catalana
EL PP reactiva su campaña este fin de semana, que se paralizó por el fallecimiento del expresidente Adolfo Suárez. Andalucía, Cantabria y Cataluña celebran sus respectivas convenciones. Arias Cañete acudirá a su feudo andaluz, no como candidato, que aún no lo es y ni siquiera él mismo sabe si lo será, sino como titular de Agricultura. Apoyará al recién nombrado presidente regional, Juan Manuel Moreno, quien intenta hacerse un hueco en el intrincado paranoma político del feudo socialista. A la convención de Cantabria asiste el vicesecretario general del partido, Esteban González Pons, en tanto que Soraya Sáenz de Santamaría se desplaza a Cataluña para respaldar a Alicia Sánchez-Camacho, muy presente estos días en los medios ante la posibilidad de pasar también a engrosar las listas europeas.
La vicepresidenta, que estará al frente del Consejo de Ministros dado que Mariano Rajoy ha viajado a Galicia para asistir al sepelio de su hermano Luis, acude a Barcelona pocos días después de que el Constitucional tumbara la declaración soberanista propuesta por la Generalitat. Su presencia es la más solicitada desde los comités regionales, junto a Arias Cañete. La ministra de Fomento, Ana Pastor, es bien valorada en Cataluña y en su tierra de adopción, Galicia.
"Carecer de candidato a estas alturas no es problema porque un ministro siempre tiene tirón. Incluso más según qué candidato", comentan fuentes del partido, que desconocen aún la fecha y el nombre del elegido para encabezar la lista electoral. La maquinaria propagandística del PP está ya en plena ebullición. Quedan menos de dos meses para la cita con las urnas. Los ministros, alguno de ellos algo renuente a implicarse en la actividad partidista de la campaña, han sido animados a abandonar la pereza y viajar por España los fines de semana.