El Partido Popular ha reforzado su programa electoral en materia de seguridad, uno de los aspectos hasta ahora menos mencionados. "Vamos a ser muy contundentes en nuestra prioridad en la lucha contra el yihadismo", anticipaba este martes Javier Maroto, uno de los vicesecretarios generales de la formación. Al hilo de los episodios que han sacudido a Francia durante este fin de semana, el PP se despoja de complejos y anuncia que la seguridad formará parte del trípode básico de su programa, que está ya prácticamente ultimado. La seguridad es uno de los asuntos que con más firmeza ha defendido el gobierno de Rajoy y que más quebraderos de cabbeza le ha producido a lo largo de la legislatura.
La recuperación económica y la creación de empleo centra el primer punto del texto programático, que se dará a conocer la semana próxima, luego de que Rajoy presente este sábado en Cataluña a sus cabezas de listas electorales, en un acto que hubo de suspenderse por los dramáticos sucesos de París. La unidad de España y la defensa de los símbolos nacionales es otro de los elementos clave del trabajo, en especial en lo que hace al uso del castellano en la enseñanza y al himno y la bandera. Finalmente se ha potenciado el apartado de seguridad, un aspecto en el que el PP ha desarrollado una intensa labor parlamentaria durante esta legislatura.
El Gobierno es consciente de que la lucha contra el yihadismo necesita una respuesta bien diferente
Dos leyes en el ojo del huracán
El Gobierno de Rajoy sacó a delante una Ley de Seguridad Ciudadana en contra de los postulados de toda la oposición, incluido el PSOE, que planteó un recurso ante el Constitucional. Se da la circusntancia de que este texto se queda muy corto al lado de los anuncios que ha desgranado François Hollande en su intervención histórica del lunes en Versalles. Aquella inciativa parlamentaria, que fue bautizada como 'ley mordaza' pretendía incorporar algunos aspectos de la seguridad que hasta entonces aparecían desperdigados en distintas leyes y normas. Recibió enormes críticas, ya que gran parte de la oposición consideró que se trata de un iniciativa dedicada en forma obsesiva a impedir la libertad de expresión y de manifestación. Pedro Sánchez la utilizó como una de sus armas arrojadizas más contundentes durante el último período de sesiones.
Meses después, el Ejecutivo de Rajoy aprobó también una Ley de Defensa Nacional, que atribuye poderes muy especiales al presidente del Gobierno, que podrá retirar atribuciones a cargos y responsables públicos en el caso de que ignoren o inclumplan la legislación. Esta medida parlamentaria, de perfil muy innovador, también fue objeto de polémica puesto que se le atribuyen sus poderes especiales para afrontar situaciones fuera de control en algunas instancias territoriales, como pudiera ser una comunidad autónoma. Cataluña, enseguida, centró el eje de los debates. En su momento se le reprochó a esta ley que podría utilizarse como figura alternativa en el caso de que el Gobierno no tuviera la voluntad de aplicar el artículo 155 de la Constitución para afrontar episodios fuera de control por parte de la Generalitat.
Pero el principal foco del programa del PP, en este apartado, se centra en la persecuición del terrorismo yihadista, puesto que España aparece como uno de los objetivos recurrentes en los mensajes de los portavoces del Estado Islámico, que siempre mencionan a nuestrro país bajo el nombre de Al Ándalus. El Gobierno es consciente de que la lucha contra este tipo de terrorismo, que ya actúa en forma muy diferente a como ocurría en los tiempos de Al Qaeda, necesita una legislación y una respuesta bien diferente, tal y como quedó plasmado en el mensaje del lunes del presiente francés.
"En la lucha contra este tipo de terrorismo vamos a ser muy firmes, vamos a ser referencia", dice Maroto
"En este asunto vamos a ser muy firmes, vamos a ser referencia", comentó Maroto a los periodistas. No se han dado demasiados detalles sobre el desarrollo de este trabajo, pero se da por hecho que España es uno de los países del mundo mejor preparados para afrontar este peligro desde los atentados del 11M, el golpe terrorista más sangriento de cuantos han tenido lugar en Europa. Ha trascendido, eso sí, que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, telefoneó este martes al consejero catalán del ramo, Jordi Jané, para explicarle las medidas que su departamento está aplicando para hacer frente a la situación de excepcionalidad que se están viviendo estos días en toda Europa.
Seguridad, unidad de la patria y lucha contra el paro serán, pues, las líneas maestras de este programa, cuya elaboración se ha centralizado desde Génova, con Andrea Levy como gran muñidora del trabajo, bajo la supervisión de Jorge Moragas.