Uno de los legados de la etapa de José María Aznar al frente del PP vive su momento más delicado. El 'escándalo Bárcenas' y el desgaste del segundo año de gobierno, marcado por drásticos ajustes en sanidad y educación, han estancado el número de afiliaciones al partido que dirige Mariano Rajoy. Según los datos actualizados que maneja Génova, facilitados a Vozpópuli, el censo de simpatizantes (no abonan cuotas) y militantes se sitúa en los 865.761. De esta cifra, previa al último semestre, se desprende que el PP cerró 2013 con la suma más baja de nuevos afiliados de las dos últimas décadas.
Desde 1993, fecha en que los populares contaban con 375.232 militantes (con la victoria de Aznar sólo tres años después la adhesión era ya de 504.341), el ritmo de afiliaciones no había experimentado un descalabro como el actual, que se mantiene en torno al 80% respecto al periodo 2009-2012. De septiembre de 2012 al mismo mes de 2013, las incorporaciones a las filas populares apenas han superado las 15.000. Y es que hasta el pasado febrero, el PP se había sobrepuesto al 'caso Gürtel' ganando 113.000 adhesiones desde enero de 2009. Sin embargo, ante el estallido de los papeles del extesorero y la supuesta contabilidad B del PP, la respuesta no ha sido la misma. Desde febrero de 2013, con 862.815 afiliados computados, la formación popular registró escasamente 2.946 apoyos en seis meses. Este incremento era el que antes se producía en un solo mes, con Rajoy en la oposición y José Luis Rodríguez Zapatero en el Gobierno.
Aún con todo, fuentes de la dirección popular dan por buenas las cifras y achacan el no haber podido conseguir más inscripciones en el censo del partido a la necesidad de estar “centrados en desmentir las manipulaciones y las falsedades diarias servidas a la opinión pública” en torno al 'caso Bárcenas'. Las mismas fuentes lamentan que no hayan dedicado “más tiempo y esfuerzo a explicar las reformas emprendidas por el Gobierno” de Rajoy.
El partido de Rosa Díez no logra cazar adhesiones en la fuga de votos del PP y pierde casi 500 afiliados con respecto a septiembre de 2011
A la vista de estos datos, la comparecencia del jefe del Ejecutivo en el Senado el pasado 1 de agosto para explicar los SMS que intercambió con el extesorero popular Luis Bárcenas tampoco mitigó la caída en el ritmo de afiliaciones al PP. Una remontada que no llegó y que sigue sin llegar a escasos meses de las elecciones al Parlamento Europeo del próximo 25 de mayo.
El estancamiento coincide además con la proliferación de plataformas que están pescando apoyos entre descontentos del PP con la gestión de Rajoy. Aquí también se enmarcan los simpatizantes y militantes que reunió el eurodiputado del PP Alejo Vidal Quadras el pasado septiembre para denunciar el “grave incumplimiento del programa electoral” o las bajas del PP que han puesto sus ojos en el Movimiento Ciudadano de Albert Rivera.
El 'consuelo' de mirar a la oposición
Pese a la merma sufrida, el PP busca su 'consuelo': es el único partido que aún no ha sufrido una sangría de afiliados, según sus números. No ocurre lo mismo con el PSOE, que reconoce haber perdido 24.000 adhesiones en los dos últimos años. El censo socialista registra algo más de 200.000 abonados y una cifra similar de simpatizantes, al margen del PSC y las Juventudes Socialistas.
Por su parte, UPyD contabiliza, tal y como informó en el II Congreso Nacional celebrado el pasado noviembre, 6.165 afiliados a fecha de septiembre de 2013. A ello hay que añadir quienes están adscritos al partido bajo el perfil de simpatizante, grupo que alcanza los 1.878 seguidores. El partido de Rosa Díez alcanzó su cuota máxima de afiliación en septiembre de 2011, cuando llegó hasta los 6.634 miembros. Desde entonces ha perdido casi 500 y no logra cazar adhesiones en la fuga de votos del PP. Desde la formación magenta atribuyen su retroceso a "la negativa situación política y económica en el conjunto del país".