España

Podemos advierte a Yolanda Díaz de que Íñigo Errejón intentará controlar Sumar

Los morados no han superado aún la traumática ruptura de Vistalegre II y avisan a la vicepresidenta segunda de que su excompañero no es de fiar

La disputa entre Podemos y Yolanda Díaz revive batallas pasadas. Los morados no han superado aún la traumática ruptura de Vistalegre II que dividió al partido en dos y provocó la escisión de Más Madrid. Íñigo Errejón sigue enturbiando la mirada que el partido de Ione Belarra (y Pablo Iglesias) tiene sobre la política española. Y lo cierto es que, según ha sabido este diario, en Podemos ven a su examigo dispuesto a aliarse con la vicepresidenta segunda solo por un fin. "Íñigo [Errejón] solo acepta lo que puede controlar o cree que puede controlar. Tener razón no le basta", sintetiza una fuente morada.

En verdad, Podemos siempre ha sido muy receloso sobre los movimientos de Errejón. Tras la figura del líder de Más País subyace un conflicto más formal que ideológico. El mismo que subyace respecto a Yolanda Díaz. No por casualidad, Pablo Iglesias dijo hace unas semanas que la vicepresidenta segunda estaba más cerca de Más Madrid que de Podemos. Pero no se trata a algo ideológico, sino de una cuestión formal. Los morados lamentan que tanto Errejón como Díaz se esfuercen en ser una suerte de marca blanca del PSOE, aceptable para la élite. En Podemos molesta que solo ellos sean el rostro enfadado, fuerte y duro que dice las cosas como son. Por eso creen que hay una concertación entre Yolanda Díaz y el PSOE para destruirles.

El conflicto formal está claro. Tanto Yolanda Díaz como Íñigo Errejón parten de la premisa de que para construir mayorías, y sobre todo, para llegar al poder, toca mostrarse como una izquierda asumible y no confrontar en ciertos asuntos, porque son batallas perdidas de antemano que les descartan como opción transversal. El penúltimo ejemplo lo puso el propio Iglesias hace unos días cuando quiso retratar a sus compañeros. "Todos los partidos del espacio comparte su rechazo a la OTAN. Pero solo han escuchado a las ministras de Podemos atacarla. Ni el ministro de Consumo, ni la ministra de Trabajo, ni por supuesto, el ministro de Universidades, lo han hecho".

Cómo relacionarse con el PSOE

La forma en la que la izquierda a la izquierda del PSOE debe relacionarse con Ferraz es clave. Es uno de los más agrios asuntos de discusión en la galaxia morada. Ya lo fue antes de que se formara el Gobierno de coalición, cuando hubo una parte importante, con Izquierda Unida a la cabeza, que quería un acuerdo programático con los socialistas y dejarles a ellos el desgaste de gobernar. Pero enfrente estuvo Iglesias, que nunca quiso despreciar la oportunidad de demostrar que la izquierda radical podía llegar a Moncloa y gobernar con sentido para transformar.

Cabe recordar que a Errejón le costó sumarse a los planes de Díaz. El líder de Más País vivió una encrucijada. Un sector de la izquierda a la izquierda del PSOE sigue viendo a quien fue fundador de Podemos como uno de los egos a los que se refirió Díaz y que amenazan con espantar a la ministra de Trabajo. Pero en este tiempo, Errejón parece haberse dado cuenta de que solo podrá respirar políticamente junto a la vicepresidenta. En su momento, solo su aliada en Madrid, Mónica García, vio con buenos ojos integrarse en la plataforma de Díaz. Y su partido estuvo sumido en dudas y discrepancias por la entente con la ministra de Trabajo que, irremediablemente, supondría la cohabitación con Podemos. Toda una patata caliente.

Un liderazgo del que depende

Ese sector a la izquierda del PSOE está convencido, además, de que la supervivencia política de Errejón depende de su liderazgo y de que ese es el motivo por el que titubeó. Aún no se sabe si el líder de Mas País se perderá en la irrelevancia de un puesto lejos del número uno en futuras listas electorales. Y esa es una de las claves, si Errejón no tiene una posición destacada, algo muy complicado, se quedará sin espacio. Eso sí, cuenta con una gran ventaja. Algunos de los más fieles colaboradores de Yolanda Díaz proceden del 'errejonismo'. Por eso, apuntan fuentes moradas, él cree que puede controlar el proceso de mutación de la izquierda que representa Sumar.

Más allá de la confrontación formal. Hay otro gran eje de división. Tanto Errejón como Díaz son valedores de la apuesta por que el Estado pacte con el capital; algo que supone aceptar las reglas de juego del capitalismo. Y en esa línea comienzan las desavenencias entre el tándem Díaz-Errejón y Podemos. El entorno de Yolanda Díaz valoran enormemente la “gran capacidad intelectual” de quien un día sostuvo las riendas de Podemos junto a Pablo Iglesias.

El relevo de Pablo Iglesias al frente del liderazgo de Unidas Podemos en favor de Díaz y el anuncio del proceso de escucha dejó sin espacio político al líder de Más País, que persigue el mismo proyecto de transversalidad al que se debe ahora la titular de Trabajo. Pero tras más de un año con la vicepresidenta construyendo su liderazgo, al líder de Más País no le ha quedado más remedio que aceptar su posición e intentar pensar que podrá controlar lo que está por llegar.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli