Santiago Abascal ambiciona el escaño que ha tenido Pablo Casado y sus antecesores al frente del PP en las últimas décadas en el Congreso de los Diputados y que sus 24 diputados se coloquen en forma de cuña en la parte que está más a la derecha del hemiciclo, según indicaron varios parlamentarios de Vox a Vozpópuli.
La formación 'verde' sabe que no está en su mano el elegir el sitio más adecuado en la Cámara baja ya que cualquier decisión sobre la ubicación de los escaños tiene que ser aprobada en la Mesa del Congreso, donde no parece que vaya a tener representación al constatarse que el PSOE pretende quedarse con 3 puestos, mientras que PP, Ciudadanos y Podemos optarían a dos cada uno.
Vox ha iniciado contactos preliminares con el PP para abordar tanto la composición de la Mesa como el reparto de escaños en el hemiciclo. El punto de partida de Abascal es que él y su portavoz se sienten en el sitio que han tenido Casado y su número dos -Dolors Montserrat- en la última parte de la legislatura y que los escaños de Vox se prolonguen hacia atrás. "Así podrán decir con razón que ocupamos la extrema derecha" del hemiciclo, apuntó con ironía uno de los nuevos diputados de Vox.
Otra solución: entre PP y Cs
Ese cambio implicaría que las posiciones de Casado y sus diputados del PP detrás de la bancada azul del Gobierno quedarían más centradas en la Cámara baja. De ser así, al líder popular sólo le separaría de Albert Rivera una de las escaleras que tiene el hemiciclo.
Precisamente, esa hipotética posición del Casado y sus diputados populares sería la que Vox podría aceptar como solución alternativa. De esta forma, los 24 escaños de la formación derechista quedarían encajonados entre Ciudadanos -a su izquierda- y el PP -a su derecha- siguiendo el ejemplo que se empleó la pasada legislatura con Podemos, que no ocupa la 'extrema izquierda' del pleno sino una posición más centrada.
Cualquier otra decisión impuesta por la Mesa será rechazada por Vox, que en ningún caso aceptará como mal menor acabar en la parte alta del hemiciclo, lo que en la jerga parlamentaria se llama el 'gallinero', advierten las citadas fuentes.
El precedente andaluz
Precisamente, la formación de Abascal estudia recurrir al Tribunal Constitucional la previsible decisión que adopten los cuatro principales grupos de dejarles fuera de la Mesa. Para ello esgrimirán que Vox superó el 10% de los votos cuando hay nueve puestos a repartir y que nunca en el período democrático un grupo con 24 escaños se ha quedado fuera de este órgano de decisión.
Existe un precedente no muy lejano que acabó con una sentencia de nulidad por parte del TC. Fue en la pasada legislatura andaluza. El PP de Juanma Moreno alegó en 2015 que se vulneraron los derechos de una de sus diputadas al ser "excluida" de las tres secretarías a pesar de haber sido la segunda más votada. El Alto Tribunal aceptó los argumentos y anuló la composición de la Mesa del Parlamento andaluz. Eso sí, un año y medio después de la presentación del recurso.
Los diputados de Vox aprovecharán este viernes para tener la primera reunión como grupo y hacerse una foto de equipo en la escalinata del Congreso de los Diputados. Además, se anunciará el fichaje de la presentadora de Intereconomía Rosa Cuervas-Mons como nueva jefa de prensa de Vox en la Cámara baja.