La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Igualdad en funciones, Carmen Calvo, ha planteado este miércoles la necesidad de una "revisión" o un "nuevo abordaje" en la lucha contra la violencia machista, tras la llegada de partidos de "ultraderecha" a las instituciones.
Así lo ha asegurado durante su participación en el acto de presentación de la nueva web del BOE, en una intervención en la que ha aprovechado para confirmar que, "tristemente", España ya suma 1.000 mujeres asesinadas desde 2003.
La ministra ha recordado que la "violencia de género" se produce "contra las mujeres por el hecho de serlo" y "no tiene nada que ver" con la "violencia intrafamiliar o estructural" a la que se refieren PP y Vox. "La violencia de género es un concepto en el que ha habido que trabajar desde el punto de vista social, político y jurídico y está en tratados internacionales, en la jurisprudencia y en las leyes", ha indicado.
Por eso, ha asegurado que no habrá "punto de retorno" en esta cuestión, aunque "la ultraderecha se empeñe y los partidos de derechas sean incapaces de contenerlos". Se ha referido, en este sentido, a la "escandalosa" decisión del nuevo alcalde de Madrid, el popular, José Luis Martínez Almeida, de quitar "de manera visible" las pancartas contra la violencia de género que se colocaron en las instituciones madrileñas durante el mandato de Manuela Carmena.
Mismo respeto que para las víctimas por terrorismo
Para Calvo, es necesario ahora "empezar a trabajar en una revisión" de otros espacios de lucha para abarcar más allá del Código Penal, la legislación procesal, las ayudas a las víctimas o la prevención. "Tendremos que hacer un nuevo abordaje del asunto, porque los asesinatos se hacen porque seguimos en sociedades sexistas y no por otra cosa", ha apuntado.
"Quien niegue estos 1.000 asesinatos está negando la realidad y contra eso no se puede hacer política pretendiendo que la hacemos de manera democrática", ha señalado en referencia a Vox, partido que niega la existencia de la violencia de género.
En este sentido, ha recordado que las víctimas no son sólo las mujeres, sino que en este tiempo también han sido asesinados 28 menores y hay 243 huérfanos por esta lacra. Calvo ha reclamado respeto a las familias de las víctimas, concretamente, ha dicho, "el mismo respecto que otras víctimas de las que este país ha hecho gala de saber respetar a lo largo de 40 años", ha indicado.
"Exijo ese mismo respeto, cuando ahora observo como la ultraderecha nos lleva a un terreno de desaparición, de debilitamiento, de esta lucha que falta con mucho al respeto a estas mujeres y al reguero de dolor que ha dejado a su familia e hijos", ha declarado.
Finalmente, se ha comprometido a continuar poniendo en marcha el Pacto de Estado contra la violencia machista, aprobado "sin fisuras" en el Congreso en 2017 y ha conformado su intención de "no parar" para terminar con la sociedad machista y sexista de la que "no se libra ningún país del mundo".