Pablo Casado quiere llevar la iniciativa de la manifestación del domingo para pararle los pies a Pedro Sánchez. El líder del PP se ha puesto en contacto con Albert Rivera y Santi Abascal para ir juntos a esta concentración en la que se pretende frenar el sometimiento del Ejecutivo a las exigencias separatistas y, al tiempo, reclamar a Sánchez que cumpla con su promesa de convocar elecciones.
Casado, con Rivera y Abascal
Nunca hasta ahora se habían movilizado en la calle estas tres fuerzas políticas que acaban de llegar a un acuerdo en Andalucía. Este domingo estarán los tres líderes en la cabecera de la manifestación, aunque está por despejar los detalles sobre el formato del encuentro.
Casado considera que Sánchez no está legitimado para seguir en La Moncloa, luego de la humillación que suponen sus acuerdos con los secesionistas. La aceptación de un 'mediador' en la mesa de conversaciones entre el Ejecutivo y los separatistas, matizado luego, torpemente, por la vicepresidenta Carmen Calvo, ha producido una tempestad de respuestas.
Moción de censura
Casado pretende la comparecencia de Sánchez en el Congreso para que explique semejante idea, "una traición al Estado, una rendición, una humillación". En una intervención desde Cuenca, el líder de los populares insistió en que promoverá todo tipo de actuaciones políticas, ciudadanas y parlamentarias para atajar la deriva a la que conduce este Gobierno.
No contempla por ahora la posibilidad de una moción de censura, "ya que las cifras no salen", según ha comentado, pero sí abre la puerta incluso a la vía judicial ya que considera que determinadas actuaciones llevadas a cabo por el Ejecutivo, en especial en lo que hace a la política catalana, pueden ser constitutiva de delito por incurrir en la prevaricación.
El PP también prepara una manifestación en Barcelona, según ha declarado Alejandro Fernández, jefe de filas de los populares en la región. Se está contactando con asociaciones cívicas beligerantes con el secesionismo para sumarse a la convocatoria de Madrid.