La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), una organización que trabaja desde hace 40 años para asistir a los refugiados en España, pasa por uno de sus momentos más difíciles. Tras crecer en presupuesto y plantilla, una decisión del ministerio de Seguridad Social y Migraciones, liderado por José Luis Escrivá, dibuja escenarios de recortes. Para fuentes de Izquierda Unida, la CEAR es una entidad muy cercana al partido. Para algunos es “el cortijo de Enrique Santiago”, el diputado de Unidas Podemos próximo al vicepresidente Pablo Iglesias, que acaba de cerrar el fichaje de una exdiputada de IU, encargada de llevar a cabo el despido colectivo.
Según ha podido saber este diario, y confirmado por fuentes oficiales de la CEAR, en la ONG está en marcha una negociación colectiva para activar un ERE que puede afectar a hasta 400 trabajadores. De momento la cifra es provisional, puesto que todo dependerá de la decisión del ministerio de Escrivá. El ministerio debe establecer los nuevos criterios para conceder los asilos a las personas que lo pidan, y sobre esos criterios bajarán las ayudas públicas, y con ellas la plantilla de la ONG.
Según las últimas memorias de la entidad, la CEAR ha recibido hasta 88 millones de euros en subvenciones estatales. El Ayuntamiento de Madrid, durante la etapa de Manuela Carmena, también inyectó más dinero a la ONG (más de un millón de euros). Lo hizo mientras Mauricio Valiente era el tercer teniente de alcalde del gobierno municipal, aunque antes había desempeñado un cargo directivo.
Enrique Santiago, líder del PCE y hombre de confianza de Iglesias, figura en el organigrama de la entidad como socio de honor. Además de Valiente y Santiago, la ONG ha contratado a otra exdiputada de IU, Virginia Díaz, como tesorera después de ser vocal de IU en la entidad. Ahora, según fuentes internas de CEAR, se ha encargado de la negociación colectiva de los ERE, lo que ha molestado a miembros de la organización.
Una ONG nacida para ser transversal
La CEAR, según defienden oficialmente, es una entidad que no se siente vinculada ni cercana a ningún partido político en concreto. Nació con la vocación de la transversalidad, y entre sus órganos tuvo a miembros del PP y del PSOE, además de representantes de todas las confesiones religiosas. Sin embargo, reconocen que a lo largo de los últimos años personas de la primera línea de IU han entrado y “sido activos” en la organización más que otros.
Desde IU lo ven con claridad. Hablan de “puertas giratorias” para calificar el fichaje de Díaz. Y lamentan que la exdiputada haya aceptado los ERE. “Era la vocal representante de IU en la CEAR, y ahora ha sido contratada por la empresa para negociar el convenio colectivo y el ERE”, recalcan las fuentes consultadas. Detrás de ese fichaje se encontrarían “Santiago y Valiente”.
“CEAR es la agencia de colocación de IU”, atacan, a la vez que hablan de figuras como Juanma Villalón y Olgher Santodomingo, los dos cercanos a Comisiones Obreras y al Foro de Sao Paulo, como colaboradores de la entidad. El actual presidente, Carlos Berzosa, ha contratado a Valiente de director de servicios jurídicos (aunque está en excedencia) y ahora a Díaz.
Despido colectivo
El viernes de la semana pasada se celebró la primera reunión para abordar el tema del despido colectivo. La dirección ya ha informado a los trabajadores, que ahora están a la espera de saber cómo se concreta la directriz ministerial para conocer su futuro. La plantilla de la CEAR es actualmente de 1.200 empleados. Algunas fuentes apuntan a que podrían perder su trabajo unas 400 personas. Otros esbozan cifras más bajas, y señalan que dependerá de lo que decida Escrivá.
La plantilla de la CEAR es actualmente de 1.200 empleados. Algunas fuentes apuntan a que podrían perder su trabajo unas 400 personas
Cabe señalar que a lo largo de los últimos meses las relaciones entre Escrivá y los ministros de Unidas Podemos ha sufrido un importante deterioro. En los primeros compases del Gobierno, Iglesias dirigía palabras afectuosas hacia el ministro técnico. La relación se torció con la elaboración del Ingreso Mínimo Vital, y estalló después de los reproches públicos de Iglesias por los retrasos y la reacción de Escrivá.
Ahora se puede añadir un ladrillo más en ese desencuentro. Más aún si, como argumentan en IU, esta organización ha acabado convirtiéndose en una entidad demasiado cercana al partido y que contrata a políticos afines, aunque tenga la misión de ayudar a las personas que tienen derecho de asilo en España.
