El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, reunió el pasado sábado a la cúpula de su partido para fijar las líneas maestras de la estrategia que desplegará la formación morada en las elecciones autonómicas y municipales que se celebrarán en 2019. Entre los asistentes al Consejo Ciudadano Estatal -el máximo órgano entre asambleas- estaba el secretario general del partido en la Comunidad Valenciana, Antonio Estañ.
La voluntad de la Ejecutiva en esa comunidad es repetir la coalición electoral con la que se presentaron a las elecciones generales de 2016 junto a Esquerra Unida del País Valencià (EUPV) y a Compromís, el partido-coalición de Mónica Oltra y Joan Valdoví. Bloc Nacionalista Valencià, la formación a la que pertenece el diputado en el Congreso, es la más reacia a la posibilidad de reeditar el pacto. Iniciativa del Poble Valencià, a quien pertenece la vicepresidenta de la Generalitat, no se pronuncia con tanta contundencia. El pacto con Podemos en 2016 se consumó in-extremis a pesar de las reticencias de los primeros.
Esa fórmula no les reportó más votos que en las autonómicas de 2015, donde concurrieron en solitario. Si en 2016 les permitió entrar en la Cámara Baja, en las autonómicas no tienen esa necesidad, argumentan fuentes consultadas. Ambas formaciones no han establecido todavía contactos formales para explorar una reedición de la alianza Compromís-Podemos-EUPV: A la Valenciana. Ahora, la marca de Iglesias además arrastra un acusado desgaste en todas las encuestas que no está claro cómo puede afectar a sus socios.
La voluntad del partido morado es realizar una primera consulta a las bases antes de abrir las negociaciones para consultar la posible fórmula de confluencia y los actores con quien llevarla a cabo. "La forma de presentarnos a las elecciones lo decidirá la militancia", sostienen. En caso de resultado afirmativo, se establecerán mesas de negociación con el resto de fuerzas políticas para diseñar una candidatura sólida. El fruto de esas negociaciones deberá volver a ser ratificado por los inscritos mediante una nueva votación.
Podemos forma parte del Acuerdo del Botánico, por el que el PSPV de Ximo Puig gobierna junto a Compromís en la Generalitat. El partido morado participa desde fuera y a lo largo de los últimos meses ha tenido algunos tira y afloja con sus socios. A nivel estatal, Compromís lleva meses marcando distancias con Podemos. De hecho, no entró a formar parte del grupo confederal de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, sino que sus cuatro parlamentarios están en el Grupo Mixto. Uno de los hitos del distanciamiento fue la petición a Iglesias para frenar la presentación de la moción de censura a Mariano Rajoy hasta después de las primarias del PSOE.