La policía ha realizado varias cargas contra varios miles de radicales independentistas concentrados en Via Laietana en torno a la sede de la Jefatura Superior de la Policía. Los agentes han tenido que actuar contra los violentos tras soportar durante una hora el incesante lanzamiento de objetos. El asfalto de la calle es ya una alfombra de vidrio, latas y botellas, y la zona se ha convertido en un correcalles en el que la policía se ha visto obligada a retroceder ante el empuje de los violentos.
Habían sido convocados para una marcha de estudiantes en Barcelona y actualmente buena parte de la calle está tomada por ellos frente a apenas una treintena de antidisturbios que a duras penas protegen en un cordón policial el edificio policial bajo una lluvia incesante de objetos.
En una de las cargas el lanzamiento de botellas ha alcanzado a un periodista provocándole una herida sangrante en la frente que ha requerido de asistencia médica.
Los manifestantes han respondido a las cargas lanzando material pirotécnico y botes de humo a los agentes.