La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha afirmado este martes que "es un poco pronto para dar lecciones o recibir lecciones" sobre la gestión de la epidemia de coronavirus, después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmase este lunes que "España está siendo diezmada".
"Podría decir que es fácil ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio pero no lo voy a hacer porque no es la forma en que tenemos que enfrentarnos a la pandemia", ha dicho González Laya en rueda de prensa telemática en el Palacio de la Moncloa.
Además, ha afirmado que la Administración estadounidense se ha interesado por las medidas que está tomando España. En su rueda de prensa, Trump había afirmado también que no parece que ni a España ni a Italia les esté yendo muy bien.
La ministra española ha defendido que, en estos momentos, lo importante es concentrarse en erradicar la pandemia, "con seriedad y siempre con mucha humildad".
Además, ha afirmado que España sí ha sido uno de los primeros países que ha anunciado que convocará una comisión de evaluación de la respuesta al Covid-19, tal como dijo el presidente del Gobierno al inicio de la crisis, en la que el país evaluará sus aciertos y sus errores.
Además, ha asegurado que gran parte de su tiempo lo pasa dialogando con los Gobiernos de otros países, de aquellos donde la pandemia va por delante de España y de otros donde la evolución va por detrás, para aprender unos de otros sobre posibles respuestas.
"Muchos se acercan a España, incluida la administración americana, para que compartamos con ellos lo que estamos haciendo, con gran humildad porque nadie tiene la receta mágica, pero también sin complejos, explicamos lo que estamos haciendo", ha señalado.
Unificación de criterios
Por otro lado, la ministra ha reconocido que es esencial que los países europeos mejoren los datos que ofrecen sobre la incidencia de la pandemia y sobre todo la coordinación de los criterios con los que los recogen.
Según ha dicho, la hoja de ruta que la Comisión Europea aprobará previsiblemente mañana para orientar la futura relajación de las medidas busca precisamente "coherencia y coordinación", también en los datos.
"Vamos a necesitar una mayor homogeneidad en los datos que manejemos para organizar la desescalada", ha reconocido, también para aspectos como la gestión de las fronteras interiores o exteriores.