Todos los inicios de legislatura en el Congreso hay una guerra mucho más soterrada que la que libran los partidos por la ubicación de los escaños en el hemiciclo pero no menos sonada: la guerra de los despachos entre los 350 diputados que, en esta ocasión, ha llegado hasta la Mesa de la Cámara Baja, ante la cual Vox ha presentado una protesta para cambiar una situación que fuentes de la Cámara consultadas por Vozpópuli no dudan en calificar de "clara injusticia, al margen de la ideología que cada cual defienda".
Los de Santiago Abascal denuncian que la ratio de despacho para cada uno de sus 24 diputados es 15 metros cuadrados en la séptima planta del edificio ampliación -junto a Coalición canaria y el Mixto-, frente a los, por ejemplo, 28 metros cuadrados asignados a cada uno de los seis diputados del PNV, indispensables para que Pedro Sánchez sea investido presidente del Gobierno.
Abascal amplía el suyo
Los de Vox han recibido un total de 366 metros cuadrados, 15 de ellos para su líder, Abascal que, según señalan las fuentes parlamentarias consultadas, ha pedido tirar un tabique para juntar dos despachos individuales en uno y dar algo de rango a ese espacio de representación porque "al fin y al cabo es el líder de una formación política y en cuanto quiera reunirse con más de dos personas tienen problemas".
El reparto, que hace que los parlamentarios de la formación de ultraderecha se repartan menos superficie, incluso, que los 15 independentistas de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), otro socio indispensable con su abstención para que Sánchez pueda arrancar la legislatura, no es fruto del azar. PSOE y Unidas Podemos usan ahora la mayoría que disponen en la Mesa para establecer una especie de cordón sanitario sobre Vox... y se jactan de ello:
https://twitter.com/Adrilastra/status/1138426713019494400?ref_src=twsrc%5Etfw
Una profecía ésta de la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, que explica, en alguna medida, que el "socio preferente", Podemos, tenga en esta ocasión poco motivo de queja. En concreto, Pablo Iglesias va a ocupar con su despacho una sala que se hizo hace cuatro años sobre la base de tres despachos de parlamentario -alrededor de 40 metros cuadrados- y que venía siendo ocupada por un equipo de cinco comunnity mánager de los morados.
Justo al lado, la portavoz parlamentaria del grupo, Irene Montero, va a ocupar un despacho realizado sobre la base de tirar el tabique que separa otros dos despachos individuales. Todos ellos están ubicados en la planta tercera del edificio ampliación porque después de reducir su representación de 72 a 42 diputados, Podemos ha perdido toda la planta cuarta que ocupaban.
Y, por lo que respecta a Ciudadanos, que ha visto ampliar su espacio en casi una planta de ese edificio -la sexta, que ha abandonado el PP después de caer de 135 a 66 diputados-, las fuentes consultadas sostenían esta semana que todavía no hay un reparto concreto porque hay un tira y afloja entre ellos por ver "quien se queda con Rivera en la quinta planta y quien se sube a la sexta, lejos del padre".
