El 19 de junio de 2004 el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero derogó por ley el Plan Hidrológico Nacional (PHN) del Ejecutivo de José María Aznar, que apostaba por la construcción de un trasvase entre la desembocadura del Ebro y las cuencas mediterráneas. Y como alternativa, la entonces ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, promovió el denominado Plan AGUA, que sustituía el trasvase por la construcción de 19 plantas desalinizadoras en el litoral mediterráneo.
El encargado de gestionar este nuevo plan y los 3.798 millones presupuestados para tratar de acabar con la escasez de agua en el litoral mediterránea fue Adrián Baltanás, hombre de la máxima confianza de Narbona, cuyo nombre ha aparecido ahora como presunto receptor en 2007 de una mordida de cerca de 2 millones de euros de la constructora OHL, del empresario Juan Miguel Villar Mir, según adelantó ABC y han confirmado a Vozpópuli fuentes del 'caso Lezo'.
El rotativo madrileño explica que en una grabación los directivos de OHL Paulino Hernández Ros y Mariano Javier Peláez Toré calculan el dinero que le tenían que entregar a dos exdirigentes de la sociedad Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed) cuyo director general era Adrián Baltanás, para obtener una adjudicación pública vinculada a la planta desaladora de Carboneras (Almería).
Esta diario se ha puesto en contacto con la presidenta del PSOE y senadora, Cristina Narbona, que ha defendido la presunción de inocencia de Baltanás, que no está imputado en la causa, y en la que tampoco ha sido citado como testigo. Fuentes cercanas al ex director general de Acuamed aseguran que este rechaza haber cobrado de los directivos de OHL imputados en la Audiencia Nacional y que esta semana han declarado ante el juez Manuel García-Castellón.
Fernando Troyano
Baltanás fue nombrado en el verano de 2004 director general de Acuamed. Y según las nuevas pruebas descubiertas en la pieza separada de OHL del 'caso Lezo', este excargo habría reclamado junto al subdirector de Tratamiento de Aguas de la empresa estatal, Fernando Troyano, una comisión de dos millones de euros.
Los nombres de Baltanás y Troyano ya aparecen en la investigación previa desarrollada en la Audiencia Nacional sobre la empresa Acuamed. En concreto, un informe de enero de 2016 de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil apunta a Baltanás como uno de los responsables de que Acciona Ingeniería prestara unos servicios en el Ministerio de Medio Ambiente, a requerimiento de Acuamed, "sin que existiera reserva de crédito para el pago aparejado al mismo".
Los agentes de la UCO descubrieron que la mujer de Troyano había creado una empresa que había facturado 279.000 euros a Acciona, que había sido adjudicataria de un contrato por parte de Acuamed, la empresa en la que su marido era alto cargo.
Cambio de política
El cambio de política hidráulica del PSOE de Zapatero contó con la frontal oposición de las Comunidades Autónomas de la Región de Murcia y de la Comunidad Valenciana, ambas gobernadas por el PP. Sin embargo, Narbona mantenía las inversiones en infraestructuras del agua, que se repartían así: Andalucía, 579 millones; Murcia, 875 millones; Comunidad Valenciana, 1.219 millones y Cataluña, 1.110 millones.
El hombre encargado de gestionar 3.000 millones de euros de los casi 4.000 invertidos por el Ministerio de Medio Ambiente socialista en el Programa AGUA, Adrián Baltanás, había coincidido con Narbona en el Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente entre 1991 y 1996.
Con Josep Borrell de titular del Ministerio, Adrián Baltanás fue director de Obras Hidráulicas, mientras Narbona desempeñaba primero el cargo de directora general de Vivienda (1991) y después el de secretaria de Estado de Medio Ambiente y Vivienda.
