El fiscal del Tribunal Supremo Javier Zaragoza y el exlíder de la ANC Jordi Sánchez se han batido en un duelo de tres horas de preguntas y respuestas en uno de los interrogatorios más igualados en lo que va de juicio del 'procés'. Ha sido especialmente en el último tramo del cuestionario cuando el representante del Ministerio Público ha hecho valer un mayor conocimiento de la causa que el mostrado por sus tres compañeros en sesiones anteriores. Así es como Zaragoza ha logrado evidenciar algunas contradicciones o argumentos inverosímiles en los que ha tenido que incurrir el dirigente independentista.
1. Los accesos a los colegios al 1-O
Ha sido la última pregunta del fiscal al acusado. Le ha interrogado acerca de si en alguna ocasión intercambió con una persona llamada Xabi Strubel un correo electrónico sobre la “estrategia de cerrar con vehículos las calles adyacentes a los colegios” para el referéndum e impedir así la actuación de las fuerzas de seguridad. Sànchez ha dicho que no conocía a esa persona, en todo caso a otra con el mismo apellido, pero ha negado haber mantenido contacto sobre esa estrategia: "Estoy absolutamente convencido, no solo con él, no he tenido conversación con otra persona sobre esa cuestión".
Tras unos segundos de silencio, Zaragoza ha pedido al tribunal que se exhibiera el citado correo, de fecha de 18 de septiembre, días antes de la consulta. Sànchez se ha escudado en que no tenía conocimiento de la existencia de ese correo. “Es la primera vez que lo veo”. En ese momento ha recurrido como salida al WhatsApp del dirigente del PP Ignacio Cosidó en el que presumía de que que podrían controlar este juicio si nombraban al presidente de su tribunal, Manuel Marchena, responsable del Tribunal Supremo. El magistrado, muy activo durante la sesión, no ha hecho comentario alguno al respecto.
2. Los policías heridos
Zaragoza le ha preguntado a Sànchez si le constaba la existencia de policías heridos y contusionados en el 1-O al haber sido agredidos con vallas metálicas, objetos contundentes, cascos y sillas. “Me consta que en algunos colegios hubo alguna reacción policial desproporcionada”, ha replicado el exlíder de la ANC, quien ha citado el uso de materiales prohibidos por el Parlamento de Cataluña como las pelotas de goma. Tan solo le ha concedido que la prensa también informó de que “algunos policías sufrieron contusiones”.
Pero Zaragoza ha insistido en que hubo policías que fueron “recibidos con vallas metálicas en algunos colegios”. “No me consta”, replicó Sànchez en una respuesta que ha dado pie a otro rifirrafe. “Ya... solo le consta lo otro”, ha ironizado el fiscal. “Son las imágenes que he visto, también sé que hay un ciudadano que perdió un ojo”, ha terciado el acusado. Se refiere Sànchez a Roger Español, quien se encuentra investigado en un juzgado de Cataluña por agredir con una valla a los agentes. También hay 13 policías de aquel operativo imputados.
3. "Hasta" o "desde" el 1-O
El fiscal le ha preguntado al acusado por el contenido de la orden de la jueza del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que prohibió la consulta. Sànchez ha dicho que “la orden en ningún momento decía que no se podía estar en las escuelas, lo único que decía era que no se garantizara el recuento de votos o se participara en la logística del referéndum“. En ese punto, Zaragoza le ha matizado que “también acordaba impedir hasta el 1-O que se ocuparan los colegios”.
El dirigente independentista le ha interrumpido para matizarle: “Lo lamento, pero eso no es así”. Sostenía Sànchez que en el auto, la jueza no decía “hasta el 1-O”, sino “a partir” de esa fecha. “Es un matiz que no es menor”, ha añadido al tiempo que le ha pedido a Zaragoza que mostrase el documento. El representante del ministerio público lo ha hecho, ha leído la frase a la Sala, y era como él decía: “Impedir hasta el 1 de octubre, hasta el uno de octubre -remarcó-, no desde el uno de octubre, la utilización de locales o edificios públicos o aquellos en los que se preste algún servicio público”. Sànchez ha apelado entonces a que “no es lo mismo quedarse a dormir en las escuelas que ocuparlas para preparar el referéndum”.
4. Su tuit la tarde de la consulta
Sánchez ha declarado que jamás pudo prever que se producirían acontecimientos violentos el 1-O, algo que finalmente sucedió desde primera hora debido a los enfrentamientos entre votantes y policías. A pesar de ello, el fiscal leyó en alto un tuit del exlíder de la ANC animando a la gente a acudir a los colegios esa misma tarde: “El que no haya votado, hasta las 20 horas lo puede hacer. Todos a los colegios electorales para ayudar a conocer el recuento”.
Sànchez se ha justificado en que las cargas ya habían cesado: “Creo que ya no había ninguna actuación policial”. Ha argumentado también que era “un reconocimiento a los ciudadanos que participaron el 1-O. Era agradecer a las personas que vivieron con auténtico terror la violencia policial”.
5. Nadie les notificó nada
El fiscal Zaragoza le ha preguntado si desde ANC animaron a la gente a participar en el referéndum. Sànchez ha contestado afirmativamente y ha recordado que hizo campaña durante los 15 días previos sin que la Fiscalía le instase a dejar de hacerlo. El representante del Ministerio Público le ha recordado que tanto la Fiscalía como el TSJC tomaron medidas para que no se celebrase. Ante esto, el acusado ha argumentado que no se dio por enterado porque la ANC “jamás recibió ninguna notificación”. En otra fase de su interrogatorio ha llegado a decir que se enteró del auto de la jueza por la prensa.
6. El séptimo coche
El cuestionario también ha incluido muchas preguntas sobre lo sucedido el 20 de septiembre ante la Consejería de Economía donde decenas de miles de personas se concentraron ante el edificio donde la Guardia Civil practicaba un registro por orden del juez. Ese día, varios coches de la Guardia Civil fueron dañados. El fiscal ha mostrado fotos y ha añadió que hubo un séptimo vehículo que también fue dañado.
Sànchez le ha corregido para matizar que ese último coche apenas sufrió algo como un arañazo en la pintura. Zaragoza le ha replicado que tenía “las cuatro ruedas pinchadas” y “abolladuras” varias. También ha citado el folio del sumario en el que podía comprobarlo. En otro momento del interrogatorio, Sànchez ha dicho que nadie entró en los vehículos a lo que el fiscal le ha replicado si había visto las fotos. Ahí ha acabado el intercambio.